Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Galdós y la miseria

Galdós y la miseria
Guion
El Torres.
Dibujo
Alberto Belmonte.
Tinta
Alberto Belmonte.
Color
Alberto Belmonte, con Pauli Junquera y Miguel Serrano.
Formato
Cartoné, 96 págs, color. 27x19 cm.
Precio
22€.
Editorial
Nuevo Nueve. 2020.

El Torres nos trae su última parte de la trilogía de las artes con G. Bueno, al menos su primera parte, pues nos han hecho un «Harry Potter cinematográfico» y han dividido la última parte en dos libros. Después de la arquitectura y la pintura, le toca el turno a la literatura, y quién mejor que Don Benito para protagonizar esta obra. Galdós y la miseria  está dibujado por Alberto Belmonte y editado por la misma persona que las dos anteriores obras… aunque ahora bajo el sello Nuevo Nueve. A falta de leer la conclusión de la historia, podríamos decir que esta obra es la más exhaustiva de las tres, se nota el cariño y admiración que tiene el guionista por el autor de los Episodios Nacionales  o Fortunata y Jacinta .

Galdós y la miseria  se centra en los últimos años de vida de D. Benito Pérez Galdós, cuando se encuentra casi ciego y se cruzará en su vida Elena Menaique, a la que apodan despectivamente «la Miserias», por cómo se gana la vida, mendigando. Tras esa fachada de pordiosera se encuentra una mujer culta y trabajadora, con una vida difícil y muy mala suerte en su vida.


Al igual que en la obra Misericordia , el título de este tebeo (como le gusta a su guionista que lo llamemos) juega con el doble sentido, pues Galdós se encuentra en un momento delicado económicamente, y toda la historia gira en torno a la relación del escritor con esta mujer. De hecho, diría que más que Galdós, la verdadera protagonista es Elena. La Miserias es un personaje puramente «galdosiano»: mujer fuerte, con mala fortuna y un instinto de supervivencia poderoso. Unos enemigos muy influyentes, en una sociedad absolutamente jerarquizada y polarizada, harán que lleve todas las de perder, pero ella no se desanimará en ningún momento y seguirá luchando por sobrevivir, manteniendo su honra siempre intacta.

Probablemente ni el propio autor lo haya hecho intencionadamente, pero si en El fantasma de Gaudí  la historia se apoyaba en una cuidada arquitectura de la historia, de la resolución del misterio; y Goya: lo sublime terrible  se apoyara en un arte y ambientación puramente goyescos, las bases de Galdós y la miseria  son el propio homenaje literario, el contarnos una supuesta biografía del escritor, protagonizada por un personaje suyo. No, a pesar de que la Miserias tiene mucho de Benina (Misericordia ), es un personaje de creación propia, pero realmente podía haber sido escrito por Galdós. No es el único personaje que resulta un homenaje a la obra del excelente escritor, y el propio Torres enumera sus referencias para esta obra en un fabuloso epílogo (aunque me ha faltado la referencia a Marianela , esa joven que bien podía haber sido Elena y que, igual que Paco con Galdós, hacía de lazarillo para el ciego Pablo).

El Torres retrata una sociedad convulsa con sutileza y sin necesidad de embarrarse en política. La familia Botines representan a la sociedad más conservadora y religiosa, que chocan de frente contra esos vagos y maleantes que son para ellos los artistas, y concretamente Galdós, que siempre arrastró fama de anticlerical y amigo de republicanos. El lenguaje utilizado, por mucho que se disculpe por posibles descuidos al final de la obra, es sublime y sumerge de lleno en la atmósfera de la época.


Aunque sin duda, lo que más me ha sorprendido es la estructura de la obra. Cuesta entrar un poco en ella por los saltos en el tiempo, ese prefacio que coincide con el final que tiene, y las dudas que va despejando sobre Elena. Y lo peor es que, cuando más sumergido te encuentras en ella… llegas a un «Final del primer libro». Dada la extensión de este primer libro (90 páginas de historia), habría preferido con creces un solo tomo con la obra completa en lugar de partirlo en dos. Son decisiones editoriales y supongo que es un caramelo goloso al que se quiere sacar partido… o quizás es un homenaje más al autor, y sacarla en dos «episodios».

Alberto Belmonte hace un trabajo sobrio, como corresponde a una historia como esta. Narrativa pausada y que sitúa al lector a modo de espectador que acompaña a los protagonistas, sin apenas hacerse notar. Paletas muy sutiles de tonos apagados, casi simulando un bitono para acompañar a esa época de la que solo tenemos alguna fotografía en tonos sepia o el conocido retrato de Sorolla. Gran trabajo de ambientación, con fondos muy detallados y un dibujo que no busca en ningún momento protagonismo, sino complementar la historia escrita por El Torres.

La edición de Nuevo Nueve es fabulosa, con un tamaño algo aumentado, guardas con un retrato en acuarela de Galdós, papel off-set de muy alto gramaje y marcapáginas de tela. Es cierto que el precio del tomo es alto, pero la calidad de la edición está a la altura. Los detalles de rotulación, con esos títulos de créditos homenajeando a los periódicos de la época, o esos pequeños extras a modo de epílogo del Torres con bocetos de Belmonte, completan esta gran edición.


En definitiva, Galdós y la miseria  es una obra que rezuma admiración. Una biografía de Pérez Galdós, que podía haber sido escrita perfectamente por el escritor canario, que muestra una España llena de miserias y un autor que se acerca a sus últimos días de vida. Continuos homenajes a la obra, al lenguaje del autor, a sus costumbres… y un dibujo que le sienta como un guante a la historia, cumpliendo con nota su cometido, y manteniendo una contención tan necesaria como difícil en un autor con tan poca experiencia en el cómic (a pesar de su labor docente y en el mundo de la ilustración).

Lo mejor: Lo bien que transmite El Torres la esencia del escritor. La ambientación que da Belmonte en toda la obra. La estructura de la obra, que comienza desconcertando y acaba absorbiendo.

Lo peor: La separación en dos libros. El precio, aunque la edición lo merezca.