Recientemente, NORMA Editorial ha lanzado el sello editorial Astronave, con el objetivo de abrir su público objetivo al lector infantil y juvenil. Hemos podido entrevistar a Gerard Espelt, editor de esta nueva línea editorial, que ha tenido a bien contestar a nuestras preguntas:

¿Cuándo y cómo decide Norma editorial apostar por la línea infantil? ¿Cómo es que una editorial con la longevidad de NORMA haya tardado tanto en planteárselo?

Hace años publicábamos la revista ¡Dibus! con la que estábamos cerca del público más joven. Al cerrar la ¡Dibus! sentíamos que nos faltaba ese contacto con los lectores jóvenes, así que pasado un tiempo decidimos iniciar un sello infantil y juvenil: Astronave.

En realidad, aunque Norma no tenía un sello infantil propiamente, sí que se habían publicado algunos álbumes para los más jóvenes y, además, como he comentado, estaba la revista ¡Dibus! Sin embargo, es con el lanzamiento de Astronave cuando Norma ha apostado más firmemente por la literatura infantil y juvenil.

Hasta el momento, Astronave cuenta fundamentalmente con libros ilustrados para todas las edades, ¿pensáis ampliar con títulos específicos de cómic?

Sí, en septiembre empezaremos a publicar cómics. Lanzaremos un cómic cada mes y publicaremos tanto cómic infantil y juvenil americano, europeo y de creación propia.

Cuéntanos qué tenéis preparado para los próximos meses y a qué títulos crees que debemos estar especialmente atentos?

Como he comentado, el lanzamiento de la línea de cómic juvenil es una de nuestras apuestas más destacadas para este otoño. También  recuperaremos en Astronave algunos álbumes infantiles que se habían publicado en Norma y también tenemos varios libros de autores nacionales muy destacados, entre otras muchas novedades.

¿Vais a contar con autores “de la casa”, como Luis Royo o Daniel Torres, para llegar también a los seguidores de estos autores?

No lo descartamos en absoluto, en Norma hay una cantera de ilustradores con mucho talento y lo aprovecharemos para Astronave.

¿Crees que los niños de hoy tienen intereses diferentes a los de otras generaciones? ¿Que en la generación de Youtube y esa animación tan rápida y movida… necesitan algo acorde a lo que están acostumbrados?

Sí y no. Está claro que las tendencias infantiles, sobre todo las más comerciales, han cambiado mucho en los últimos años, pero los temas que siguen interesando a los niños son los mismos de siempre. A nivel de ilustración, la suerte es que hay público de todo tipo, algunos prefieren ilustraciones más digitales, en la línea de los contenidos que hay en internet, pero también hay espacio para otras ilustraciones más clásicas o sofisticadas.

Hablando con profesionales y editores, generalmente todos coinciden en que el cómic infantil hoy día cuesta un poco más de ser aceptado. ¿A qué piensas que puede ser debido?

En España, que ya es un país en el que los jóvenes no leen demasiado, además hay poca tradición de cómic juvenil. Cada vez más editoriales estamos apostando por esta línea, así que esperamos que pronto el cómic juvenil crezca, y que eso también ayude a atraer a nuevos lectores.

Uno de los grandes aliados para el cómic infantil siempre fue el kiosco. ¿Os habéis planteado esta vía de distribución en algún momento?

El canal kiosco requiere un tipo de distribución muy diferente al que tenemos para librerías, por lo que no es algo que nos planteemos ahora mismo.

A día de hoy, hay tiendas especializadas en productos para niños, principalmente juegos y libros. ¿Tenéis planes para distribuir en ellas con condiciones especiales (promoción, visitas de autores, actividades)?

Ya tenemos presencia en casi todas las librerías especializadas en infantil, y estamos estudiando entrar en otras tiendas dedicadas a los más pequeños. En cualquier caso, hacer promoción, mover a los autores, organizar cuentacuentos, etc. son cosas que hacemos constantemente ya que ayuda mucho a la difusión de los libros.

El target debe ser evidentemente el niño pero al fin y al cabo el que lo compra es el padre… ¿cómo intentáis hacer los productos atractivos para ambos? ¿O directamente vais buscando una de las dos franjas?

Cuando se publican libros para niños hasta 6-7 años, miramos que el contenido le guste al niño pero también a los padres y madres que son quienes tienen el poder de decisión. Con los libros para lectores a partir de 9 años pensamos en un contenido que guste al lector directamente ya que son ellos los que deciden qué leer.

Comentaba hace poco un editor de libros infantiles que uno de los problemas a los que se enfrentan es la exigencia de enmarcar los productos a una franja concreta de edad porque se daban cuenta de que un libro de 6 a 12 años podía interesar a un niño de 5, pero que el padre al ver que se salía de dicha franja tendía a dejarlo y no se atrevía. ¿Qué opinas al respecto? Al menos vosotros tendéis a poner simplemente una edad de inicio, “a partir de…”, ¿no?

De alguna forma hay que clasificar por edades los libros, para orientar a padres y libreros, pero como bien dices es algo muy relativo ya que los niveles de madurez y lectura cambian en cada niño. Nosotros damos una edad orientativa pero siempre recordando que no hay que limitarse a esa franja estrictamente.