Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Corto Maltés: Equatoria

Corto Maltés: Equatoria
Guion
Juan Díaz Canales
Dibujo
Rubén Pellejero
Formato
Cartoné. 22,5 x 29,7 cm. 88 páginas. Color
Precio
19,50€
Editorial
Norma Editorial . 2017
Edición original
Corto Maltese. Equatoria (Casterman)

En 1988 salía Mu, el último volumen de Corto Maltés que nos daría su creador Hugo Pratt y tan sólo 7 años después nos dejaría éste dejando huérfano no solo a su marinero predilecto, sino también un poco a todos sus lectores. Sin embargo, 20 años después de la muerte de Pratt llegaría Corto Maltés: Bajo el sol de medianoche, el primer volúmen de esta nueva etapa a cargo de Juan Díaz Canales y Rubén Pellejero.

Por mucho que ambos nombres vinieran avalados por obras como Blacksad o Fraternity, en el caso del guionista, y Dieter Lumpen o El silencio de Malka, en el caso del dibujante, tocar una vaca sagrada como Corto Maltés los ponía automáticamente en el punto de mira. Afortunadamente, Bajo el sol de medianoche estuvo completamente a la altura y y eso ha permitido que podamos leer actualmente Corto Maltés: Equatoria, la segunda entrega de una nueva saga que, de seguir por estos derroteros, promete ser tan larga y fructífera como la de Pratt.

Corto Maltés: Equatoria

De nuevo tendremos a Corto a la búsqueda de un tesoro imposible, que lo llevará desde Venecia hasta la provincia de Equatoria en Sudán del sur tras los pista del reino de Preste Juan y su legendario espejo mágico. Todo esto nos situará antes de la Gran Guerra, en la África colonial repleta de esclavistas, militares europeos y misterios de toda clase.

La esencia del Corto que nos dejara Hugo Pratt es conservada y enriquecida desde el más profundo amor por el personaje por parte de Díaz Canales y Pellejero. Corto Maltés encarna un ideal romántico e imposible, el lado más soñador de la aventura, un Indiana Jones sin pasar por el filtro del mercado, sin adulterar. En Corto Maltés: Equatoria de nuevo serán las historias, los viejos mitos y las leyendas las que promueven las aventuras, que a su vez terminan siendo las historias que alimentan nuestra propia aventura como lectores. En el mundo globalizado actual, Corto nos devuelve a otro tiempo y a exóticos parajes donde todo era misterio y magia y nos hace partícipes de su espíritu aventurero y romántico.

Corto Maltés: Equatoria

Del mismo modo, la Historia se entremezcla con las historias y todo se hace uno. De este modo tenemos un contexto real y muchos personajes históricos reales se pasan por las páginas de Corto Maltés: Equatoria. El aventurero Emin Pasha, el poeta Constantino Cavafis, Tippu Tip que llegaria a ser rey del Congo o incluso el mismo Winston Churchill desfilan para fundirse con el relato y hacerse uno con la leyenda de nuestro marinero luchador por las causas perdidas.

En general, la sensación al leer Corto Maltés: Equatoria es de una mayor comodidad con la historia por parte de los autores. Sea por no tener la presión que suponía retomar el testigo directamente de Hugo Pratt o bien por contar con el calentamiento de una obra previa, la historia queda más autocontenida y redonda. Díaz Canales y Pellejero parecen tener el pulso cogido a Corto por completo y nos hace vaticinar un futuro próspero para el personaje.

Corto Maltés: Equatoria

Quizá sea por esa mayor calma con la que parecen trabajar que Pellejero consigue hacer algo a priori contradictorio, como sería mimetizarse aún más con el estilo de Hugo Pratt y conseguir aún así una mayor seña de identidad. Si en Sol de medianoche se apreciaba un esfuerzo por seguir la estela de Pratt y podíamos vislumbrar aún rasgos de su propia personalidad, el resultado era casi como si ambos aspectos funcionaran por separado, casi podías decir en cada viñeta qué venía de Pratt y qué de Pellejero. En Corto Maltés: Equatoria la comunicación entre ambos estilos es mucho más fluida y desaparece por completo la sensación de ver un dibujante imitando a otro, para dar paso a una solución mucho más natural.

Aún está por ver con qué nos sorprenderán en el siguiente tomo. Con dos autores de la categoría de Díaz Canales y Pellejero, quizá hasta se superen. No obstante, con Corto Maltés: Equatoria podríamos decir que ya han puesto la velocidad de crucero y las pocas y pequeñas aristas que pudiera haber tenido Bajo el sol de medianoche han sido pulidas hasta darnos una continuación más que digna de la obra del maestro Pratt. Le quedan muchos viajes a este marinero antes de volver a Ítaca.