Es la hora de las tortas!!!

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Catwoman: Algo huele a podrido

Catwoman: Algo huele a podrido
Guion
Joëlle Jones, Ram V
Dibujo
Joëlle Jones, Elena Casagrande, Fernando Blanco, John Timms, Hugo Petrus, Scott Godlewski
Color
John Kalisz, Jordie Bellaire, Laura Allred
Formato
Rústica, 200 páginas
Precio
20.50 €
Editorial
ECC Ediciones. 2019
Edición original
Catwoman 7-13, Annual 1 USA

Comentábamos hace unos meses que Catwoman es un personaje que ha protagonizado etapas auténticamente memorables, pero que en los últimos tiempos no estaba teniendo autores especialmente inspirados… hasta que llegó Joëlle Jones. La autora, tras su breve paso por el Batman de Tom King, se encargó de la nueva serie regular de Selina Kyle, firmando guión y dibujo del primer arco argumental, Imitadoras, y dándonos el mejor cómic protagonizado por Catwoman en los últimos tiempos. Desde luego, el inicio fue tremendamente prometedor y nos dejó con ganas de más… hasta ahora que nos ha llegado el segundo tomo, Algo huele a podrido. Vamos a ver qué tal.

catwoman algo huele a podrido pg2

Como ya comentamos en la reseña del primer tomo, uno de los grandes intereses que tenía esta nueva serie de la Gata era el arte de Joëlle Jones… que en este segundo volumen se dedica casi en exclusividad al papel de guionista. Es una lástima que no podamos disfrutar de sus lápices, aunque los encargados de la parte gráfica en estos números, Elena Casagrande y Fernando Blanco, hacen un trabajo más que correcto, recordando en algunos momentos a la época de Ed Brubaker, aunque no tengan la potencia visual de la Jones, que sigue encargándose de las portadas.

¿Y la historia? Bueno, mantiene un nivel interesante, aunque ya no tenemos el factor sorpresa de los primeros números, en los que íbamos descubriendo poco a poco el nuevo entorno en el que se desarrollaría la vida de Selina en la otra punta del país, al menos hasta su vuelta a Gotham, que sabemos que antes o después ocurrirá. Ya presentada la ciudad de Villa Hermosa, sus habitantes y sus mafiosos de turno, toca ver qué se puede hacer en esta ambientación. Y las historias que nos presenta Jones son historias típicas de Catwoman, que podrían haber tenido lugar en Villa Hermosa, en Gotham o en prácticamente cualquier otro punto. La aparición del Pingüino, por ejemplo, nos presenta una de esas historias típicas en las que Selina roba algo y otro villano se lo quiere robar a ella que hemos visto un buen puñado de veces. Es una historia que podría haber sido contada en cualquier lugar y en cualquier época, y quizás ese sea el principal problema que tiene este tomo: que habiendo creado toda una nueva ambientación en la que desarrollar nuevas historias del personaje nos encontramos con una buena parte de más de lo mismo, aunque no esté mal.

Aún así, hay un número en este tomo a destacar: el primer anual de la serie, más orientado al desarrollo de personajes, en el que Catwoman toma un grupo de aprendices a las que ir adiestrando en las artes del latrocinio. Si se queda en una historia autoconclusiva o se retomará algo de lo aquí contado en un futuro es algo que está por ver, pero tendría su interés que se desarrollen ciertas tramas que Jones nos ha presentado en este número.

catwoman algo huele a podrido pg1

Acabamos el tomo con unas páginas que relacionan esta serie con el macroevento de la temporada, El año del villano. Unas páginas que, si no estás siguiendo la historia que Scott Snyder está extendiendo por todo el Universo DC, puede dejarte un poco con la sensación de estar perdido, pero es lo que suele ocurrir en estos eventos. De todos modos, no es más que un teaser de lo que está por venir. Los cuatro siguientes números sí que estarán implicados en el evento por completo, pero eso será otra historia de la que hablaremos más adelante.

En resumen, Catwoman sigue siendo una serie entretenida de leer, aunque quizás este segundo tomo dé un paso atrás después del inicio tan potente que tuvo la serie. Aún así, sigue siendo la etapa más interesante del personaje tras el desafortunado reinicio que tuvo en los Nuevos 52.