Un nuevo tomo de la Capitana Marvel de Kelly Thompson siempre es una buena noticia. La serie de Carol Danvers es una de las colecciones más frescas e interesantes que ha sacado Marvel en los últimos años. Pero este tomo nos llega con un regusto agridulce: La venganza del Nido es el arco argumental que nos lleva hasta el final de la serie, en su quincuagésimo número, y en este tomo tenemos su primera mitad.
Pero antes de tirarnos de cabeza a esta última macrohistoria, tenemos un compromiso que cumplir. Entre octubre de 2022 y febrero de 2023 se publicó en castellano El día del juicio, el último gran evento -hasta la fecha- del Universo Marvel, que enfrentó a Eternos, Vengadores y Mutantes a raíz de los protocolos de resurrección de estos últimos. Además de la serie principal, más de treinta números entre especiales, series limitadas y números de series regulares ampliaron la historia que nos contó Kieron Gillen. Capitana Marvel fue una de las series implicadas, y vemos este número con tanto retraso por su publicación en tomo en lugar de en grapa coordinada con el resto de series de la editorial. En este número no ocurre nada demasiado trascendente para la historia: Carol y su medio hermana Lauri-Ell están luchando contra un monstruo aleatorio en las calles de Nueva York mientras Chewie, el Flerken que Carol tiene de mascota, va ayudando a sus vecinos. Y para añadir un poquito de presión a la mezcla, tenemos un el juicio del Celestial Progenitor. Es un número francamente bueno: funciona por sí mismo, sabiendo lo básico del evento al que pertenece, y además en el espacio de una grapa hay tiempo para la acción y para definir a todos los personajes implicados, aunque aparezcan en un puñado de viñetas. Gran trabajo, Kelly.
Pasado este interludio llegamos al meollo de la historia. En uno de esos escasos momentos de calma que tiene nuestra protagonista, que está pasando alejada de la civilización con Rhodey, su actual pareja, recibe un vídeo pidiendo ayuda de Pícara. Hace años que dejaron atrás su enemistad, pero la historia pasada sigue ahí. Aún así, Carol ha tenido una relación muy estrecha con la Patrulla-X, grupo al que no perteneció por no ser mutante pero debe haber sido la sapiens más cercana que han tenido. Así que con la preocupación del vídeo en cuestión, acude a ver qué saben de ella.
Pícara ha salido al espacio exterior. No saben por qué, pero no pinta bien. Y Binaria también está pidiendo ayuda, así que las cosas parecen serias. Quizás incluso hasta demasiado para Carol a solas, así que se lleva una nave y un equipo de ayuda formado por Polaris, Lobezna, Gambito, Mariposa Mental, Spider-Woman y Tóxica. En resumen, algunas de sus mejores amigas y un puñado de mutantes. A nadie le soprende que, con el título del tomo y la imagen de la portada, el Nido esté metido en este jaleo cósmico. Pero… la relación con el Nido había mejorado desde lo del huevo en Krakoa, ¿no?
La verdad es que este tomo nos deja un poco con la sensación de quedarnos a medias. Y la realidad es que es así: tenemos el planteamiento y los primeros compases de una historia más larga, y aún faltan meses para que veamos su conclusión. Pero todos los puntos fuertes de Kelly Thompson están aquí, como es habitual en esta serie: diálogos brillantes, personajes creíbles y tridimensionales, relaciones interpersonales representadas de forma brillante, y momentos de acción adrenalínica. Y dado que estamos acercándonos al final, qué mejor adversario que la raza que provocó que se manifestaran los poderes cósmicos de Carol Danvers hace ya más de cuarenta años. Kelly Thompson tiene un conocimiento impecable de quién es Carol Danvers, pero también conoce su pasado al dedillo.
Al dibujo, los españoles Sergio Dávila y Javier Pina hacen un trabajo impecable. Vibrante, dinámico y visualmente potente, lo que pide la historia que tenemos entre manos.
Cuando se aproxima el final de una serie que nos ha dado momentos tan buenos como ésta, no podemos evitar tener una cierta sensación de tristeza. Pero también de reconocimiento: han pasado más de cincuenta años desde la primera aparición de Carol Danvers y estamos llegando al final de la mejor etapa que ha tenido el personaje en más de medio siglo. Eso debería dejar claro al que no lo tenga ya que Kelly Thompson ha dejado de ser una promesa: es una de las guionistas más interesantes del cómic superheroico actual.