Por fin llegó el momento de ver publicadas en España las primeras miniseries del relanzamiento de G.I.Joe por parte del sello Skybound de Robert Kirkman. En España, ha sido Moztros quien se ha llevado el gato al agua al hacerse con los derechos del Universo Energon, y tras la publicación de los primeros volúmenes de “Void Rivals” y “Transformers”, llega el momento de disfrutar de “Duke”, flamante miniserie de cinco números a cargo de Joshua Williamson y Tom Reilly.
Puede parecer algo osado, pero creo que estamos ante la mejor versión comiquera de los Joes jamás publicada. Y eso que ha habido algunas buenas. Haciendo un poco de memoria, la franquicia (tal y como la conocemos desde los años 80) debutó en Marvel Comics con una larga serie regular escrita por Larry Hama, guionista que volvería al título en otras dos ocasiones en distintas editoriales. Después tuvo un par de intentos en Blackthorne Publishing (que editó uno puñado de números en 3D) y en Dark Horse.
Mejor suerte corrieron en Image/Devils Due, pero el cierre del sello emancipado mandó a los personajes al trastero de las franquicias un par de años hasta que IDW se hizo con los derechos y nos regaló un par de centenares de tebeos cojonudos. Uno pensaba que no iba a leer tebeos más chulos de G.I.Joe que esos hasta que llegó Skybound.
Sin prisa pero sin pausa, el Universo Energon va cimentando las reglas de un cosmos de ficción en el que los protagonistas de las franquicias de “Transformers” y “G.I.Joe” van a coexistir de manera orgánica. “Duke”, es el primer paso, pues toda la trama parte de una viñeta del primer tomo de los robots transformables en la que veíamos como un soldado norteamericano sobrevivía a un encuentro con un decepticon. Como rezaba la chapa identificativa del militar, este no era otro que Conrad Hauser, más conocido como “Duke”.
Antes de entrar en materia, cabría destacar que Skybound ha puesto toda la carne en el asador fichando a autores de sobrado prestigio para ir realizando las diversas historias de este universo. “Duke” no es una excepción. Escribiendo nos encontramos al notable Joshua Williamson (que en los últimos años se ha prodigado en DC) y dibujando está el genial Tom Reilly, uno de los mejores artistas de su generación.
La historia de “Duke” se desarrolla en un escenario en el que ni G.I.Joe ni Cobra existen todavía. Como si de un thriller de acción de Tom Clancy o Robert Ludlum se tratase, “Duke” tiene un ritmo explosivo, un protagonista carismático y adrenalina suficiente como para resucitar a un cementerio entero. La búsqueda de respuestas del protagonista le hará saltar de un peligro a otro.
El guion de Williamson para “Duke” hace que la lectura de los cincos números que componen esta miniserie sea rápida, ágil y deje con ganas de más pues estamos ante un tebeo de franquicia excelente. En la línea de los cómics de “Tortugas Ninja” o “Power Rangers” que se editan en este momento en nuestro país. Ahora bien, “Duke” es también una obra accesible. No hace falta haber leído ninguna de las obras previas del Universo Energon o tener conocimiento alguno del lore de G.I.Joe. Aunque claro, si de pequeños os flipaban los juguetes de Hasbro o la serie animada, seguro que disfrutáis de lo lindo con algún que otro cameo o con la aparición de algunos vehículos (Como el Cobra Hiss) míticos.
No me gustaría terminar esta reseña sin destacar la aparente libertad creativa que está teniendo Skybound a la hora de recontar la historia de estos personajes. Tal y como pasaba en Transformers, el tono se aleja de las historias infantiloides y maniqueístas que han imperado siempre en estas franquicias. No voy a vender que el Universo Energon esté compuesto por tebeos adultos y sesudos, no me referiero a eso. Pero sí se nota un uso menos restringido de la violencia, por ejemplo. Con todo, habrá que estar muy atento a cómo evolucionan las series para poder hacerse una idea mejor del conjunto.
Por último, “Duke” es un tebeo estupendamente bien dibujado. Tom Reilly, con ese estilo a lo Chris Samnee, da toda una lección de narrativa en las numerosas escenas de acción. Su diseño de personajes, así como todo el amplio registro de expresiones faciales es de lo más adecuado teniendo en cuenta que el prota se pasa casi todo el rato siendo perseguido, disparado o golpeado. No menos virtuoso es el coloreado que aplica Jordie Bellaire. La artista hace uso de paletas de colores pálidos y muy reducidos que en algunos pasajes se limita a distintos tonos de azul y rojo con resultados espectaculares.
Moztros ha publicado «Duke» en formato rústica a un PVP de 17.50 €.