Saludos, queridos lectores. Estaba yo leyendo un libro de historia escrito en el siglo XXV en el que ponen por las nubes a un reseñador llamado Lamastelle cuando pensé: ¿Ésto no le había pasado también a Mortimer?¿Aquella vez que viajó por el tiempo?
Llegamos al tercer tomo del Integral de Blake y Mortimer de Norma.
Estamos ante un tomo con su propia historia. Para empezar, es el último que trae historias de Jacobs. Es más, el segundo tomo de las aventuras del Profesor Sato no lo dibujó él, sino Bob de Moor. Hablaremos luego de eso.
A estas alturas no os voy a hablar del estilo del autor, así que nos centraremos en las tres obras (en cuatro álbumes) que forman este tomo.
La trampa diabólica se apoya en hechos de obras anteriores, pero puede leerse como una aventura independiente del más puro estilo pulp. Tendremos de todo. Viajes en el tiempo. Dinosaurios. Luchas medievales. Guerras civiles futuristas postapocalípticas… Todo con un toque entre aventurero e inocente que recuerda a las aventuras de Flash Gordon que Jacobs dibujó tantos años antes.
Y aún así el autor tuvo problemas con la censura francesa, que se negó a permitir la venta del álbum en Francia. Que no solamente en Estados Unidos había gente en contra de la «violencia» de los tebeos que iba a «pervertir» a la juventud.
Este hecho es importante no solamente por el hecho en sí. Obligó al autor a cambiar el guión del siguiente libro, eliminando las partes más fantásticas y dejando la historia en una de tipo policiaco puro y duro.
Como detalle que nos habla del amor e interés por el detalle y el realismo de Jacobs, pidió la ayuda del matrimonio Funcken, que estaban especializados en la época medieval.
El caso del collar se convirtió en una historia policiaca tras los problemas del autor con la censura. Se ve que la violencia en historias policiacas no es violenta, pero… Centrada en París y vagamente basada en un hecho real que destruyó parte de un barrio, quizás la parte más interesante es la que transcurre en las famosas y peligrosas galerias que recorren el suelo de la capital francesa. Lugar subterraneo que, con permiso y ayuda, el autor visitó para darle más realismo a su historia.
En la serie de animación de 1997, el capítulo que adapta este álbum de Blake y Mortimer sí que tiene fantasmas. Más vale tarde que nunca, dice el refrán.
Las tres fórmulas del profesor Sato es la última creación de Jacobs. Y a la vez su obra póstuma. Compuesta por dos álbumes (aunque el título induce a algún lector a pensar que son tres), dibujó el primero con normalidad, allá por 1971-2. Un poco al estilo de Astérix y su alternancia de localizaciones entre libros, esta obra se aleja todo lo posible del París del caso del collar y se va a Japón.
Recapitulemos. Un autor realista y detallista. Japón. 1970. La documentación fue una locura. Se dice que tardó tres semanas en descubrir como eran los cubos de basura japoneses (Espóiler. Casi como los de estadounidenses).
¿Y por qué nunca dibujó el segundo tomo? A estas alturas, tenía más de 70 años y artrosis en las manos. Además de que la muerte de su esposa fue un golpe emocional muy fuerte.
Allí quedaron el guión y los bocetos.
Se intentó dibujar el tebeo pero por problemas de contratos no se pudo, hasta que Bob de Moor quedó libre y se puso a ello. Y aquí llegamos a la primera diferencia con los álbumes clásicos. Si a Jacobs le llevaba dos años un tomo, a de Moor le dieron menos de uno. Con multa económica si se retrasaba. Y se retrasó. Así que al final tuvo que ayudarle Geert De Sutter.
Esta historia se me hace más lenta que otras. Y eso que Blake y Mortimer no es una serie conocida por una lectura rápida. Quizás le falta el ritmo, siendo más pausada y mas detallista en lo que vemos gráficamente. Es como cuando lees una obra de Taniguchi, que se te escapan los ojos hacia los detalles en vez de a la siguiente viñeta.
Con la publicación de esta segunda parte podemos decir que se cierra un trabajo de 43 años.
En 1996 aparece el primer tomo ya totalmente de otros autores. Y empieza una nueva fase en la colección.
Supongo que habrá lectores que se queden aquí, con la obra del padre de la serie. Mientras otros continúan para tener todas las aventuras de los personajes. Quedan todavía cuatro tomos (que podrían ser más, dependiendo de cuantas historias salgan en francés). Como decíamos, cerramos la obra de Jacobs, pero la colección sigue abierta.
La edición incluye artículos de Jordi Canyissà y Jorge García. 20 páginas ilustradas con bocetos y alguna ilustración.
La traducción es obra de Alfred Sala.
¿Por qué leer Blake y Mortimer Integral 3?
Las aventuras a través del tiempo de Mortimer. Ese Japón donde vive el Profesor Sato. Quieres tener la colección del autor original completa.
¿Por qué no leer Blake y Mortimer Integral 3?
Si no has caido ya en el vicio, no será este tomo el que te enganche.