Todo el mundo recuerda el primer número de Los 4 Fantásticos, pero no tantos te sabrían decir qué sucede en el séptimo o el noveno. Sin embargo, si bien es cierto que con el tomo anterior se dio inicio al grupo y la nueva Era Marvel, el universo Marvel como tal, empieza en Biblioteca Marvel Los 4 Fantásticos 2.
Hay quien objeta que estos números hasta el cuarenta y tantos — que es cuando ya la serie se desata — son repetitivos y que en un número tenemos al Dr. Muerte, en el siguiente a Namor y en el siguiente a los dos juntos. No puedo quitarles la razón, porque de los seis números que recopila Biblioteca Marvel Los 4 Fantásticos 2, en la mitad de ellos salen Namor o el Dr. Muerte, pero su recurrencia es al final lo que crea mitología. ¿Cuántos se acuerdan del Hombre Milagro o de Kurrgo? Los 4 Fantásticos estaban creando un universo y necesitaban asociar elementos a su mito más allá del monstruo de la semana y son precisamente los villanos recurrentes — que se convertirán en un tropo fundamental en el universo Marvel — los que lo consiguen. Concretamente, el número sexto en que el Dr. Muerte y Namor se alían para mandar el Edificio Baxter al espacio con un dispositivo del tamaño de una lata de aceitunas no sólo es un clásico, sino que es un resumen de todos los números anteriores, un destilado de lo que sería la esencia de Los 4 Fantásticos: los chascarrillos familiares, la ciencia ficción loca hasta el absurdo, sus enemigos principales unidos, el affair Sue-Namor… si todo eso sucede una vez puede ser una aventura mejor o peor, pero cuando nos visitan con cierta frecuencia pasan a formar parte esencial, a escribirse en el ADN de Los 4 Fantásticos y entonces ya no hablamos de aventuras, sino de mitología.
Pero no todo es Dr. Muerte y Namor. Puede que personajes como Kurrgo no hayan tenido una gran presencia en estos 60 años, pero este tomo es el punto de arranque de pilares fundamentales de esa mitología de la que hablábamos, como Alicia Masters y su malvado padrastro, el Amo de las Marionetas. También se iniciarán aquí el Hombre Imposible o el cartero Willie Lumpkin y será la primera vez que Stan y Jack aparezcan dibujados en un tebeo, dando origen a uno de los hechos más peculiares de la Casa de las Ideas: en los cómics Marvel existen los cómics Marvel. Y es que hablábamos de mitología, pero la presencia de personajes recurrentes da lugar a otro pilar del Universo Marvel: La continuidad.
Tienen lugar aquí también por primera vez las bromas de la Calle Yancy, el concepto de las moléculas inestables y hasta un conato de lo que podría ser el primer «Abandono los 4 Fantásticos». Descubrimos la obsesión de Stan Lee por Hollywood, los primeros detalles del pasado en común de Reed y Ben y vemos cómo se estrechan los lazos en esta primera familia. Si en el tomo anterior prácticamente solo veíamos las broncas y las bromas pesadas, descubrimos en Biblioteca Marvel Los 4 Fantásticos 2 por primera vez el cariño que hay bajo ellas.
No todas las semillas fructificaron ni se lograron adherir a la continuidad. No hay ni rastro de los poderes eléctricos de Namor. Rara vez se menciona que Reed sea un niño rico hijo de un millonario ni que tanto él como Ben estuvieron en la guerra. También se ha ignorado casi por completo el hecho de que Los 4 Fantásticos hicieran una peli y un detalle que podría dar mucho juego y que apenas se ha insinuado en los 60 años posteriores. También en Biblioteca Marvel Los 4 Fantásticos 2 se hace referencia al enorme parecido entre Alicia y Sue y hay unas cuantas señales de que Sue le hacía tilín a Ben en la etapa inicial del grupo, que casi todos los que han llegado después han parecido ignorar.
Ahora bien, no todo es maravilloso en Biblioteca Marvel Los 4 Fantásticos 2. Aún hay que poner el chip del contexto al leer estos cómics y subir a lo más alto la suspensión de la incredulidad para disfrutar de este tebeo en toda la loca dimensión que merece. Hay que pasar por alto la compulsión de Stan Lee de sobredialogar, haga o no falta, y, por si fuera poco, a las actitudes machistas en este tomo se le unen unas cuantas racistas, pero tampoco los crucifiquemos por ser viejos.
Además, lo mejor es no hacer a estas cosas más caso del que merecen y disfrutar del arte de Kirby, que ya nos brinda joyas como esa escena de Los 4 Fantásticos flotando en el Planeta X y cuenta ya con un entintador regular y por fin acreditado, como es Dick Ayers, que dota a los lápices del Rey de esos contornos contundentes que lo hacen ganar en definición e incluso en fuerza, si eso es posible
Pero eso no es todo. Si queréis ver al Dr. Muerte escapar subiéndose en marcha a un meteorito, si queréis saber cómo es una cerradura nuclear, si no queréis perderos la pinta de un dinosaurio con traje de astronauta, si queréis ver a Alfred Hitchcock, Charles Bronson o Dean Martin, si queréis ser testigos de los huevazos que tuvieron Stan y Jack haciendo una historia completa donde la primera familia tan sólo lee cartas y otra donde vencen a un enemigo aburriéndolo, si queréis contemplar con vuestros ojos como por encima de ningún otro, el villano que vence a los 4 Fantásticos es la bolsa… si queréis estar presentes en el nacimiento de Marvel como universo, Biblioteca Marvel Los 4 Fantásticos 2 es vuestro cómic.
