Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Biblioteca Marvel La Patrulla-X 6

Biblioteca Marvel La Patrulla-X 6
Guion
Roy Thomas
Dibujo
Werner Roth, Dan Adkins, Jack Sparling
Tinta
John Tartaglione
Traducción
Santiago García y Gonzalo Quesada
Formato
Rústica, 160 páginas, a color
Precio
13,95 €
Editorial
Panini Cómics. Noviembre 2024
Edición original
The X-Men 30-35

“No es un cómic, es una máquina del tiempo”. Este es el principal eslogan de la remozada Biblioteca Marvel de Panini, que está a punto de comenzar su tercer año de publicación. En estos veinticuatro primeros meses hemos visto cómo algunas series han rodado a un gran nivel (Spiderman,Los 4 Fantásticos), otras han ido mejorando poco a poco (Thor,Hulk) y luego hay alguna que no termina de despegar, como es el caso de esta Patrulla-X, a la que todavía le falta mucho para la llegada de Neal Adams.

Es cierto que los primeros y fundacionales episodios de Stan Lee y Jack Kirby están llenos de ideas geniales. Sin embargo, la llegada de un Roy Thomas en los primerísimos compases de su carrera supuso un pequeño paso en falso. El resultado es un puñado de números en los que los mutantes parecen carecer de una dirección clara. Dicha circunstancia se ha maquillado un poco con la llegada de Factor Tres, la organización criminal presentada en el anterior tomo y que protagoniza la única trama principal que se continuó de un mes a otro… más o menos.

Porque sí, Factor Tres llegó para quedarse una temporada, pero el propio Roy Thomas parece que se olvidó de dicha circunstancia haciendo que la presencia de dicho grupo quedase relegado a un rol totalmente secundario. Una amenaza en la sombra que no es una cosa ni la otra. El grupo de Ogro y compañía aparece y desaparece de una página a otra, muestra habilidades y poderes que no concuerdan con lo poco que se sabe de ellos o se cuelan en la mansión de la Patrulla-X con una facilidad que roza lo insultante.

Ahora bien, donde la serie va ganando algún punto es el desarrollo de las tramas más “mundanas”. La presencia de Jean en la universidad da lugar a los típicos juegos de desengaños de las telecomedias de los cincuenta y sesenta como “I Love Lucy”. Este romance imposible con tintes trágicos shakesperianos entre Scott y Jean todavía está lejos de avanzar, pero al menos consigue entretener con sus continúas idas y venidas.

En el terreno argumental, esta sexta entrega de la Biblioteca Marvel dedicada a la Patrulla-X tiene alguna cosa interesante. Por ejemplo, aunque de manera inconsciente por parte del equipo creativo, se sigue mostrando que el Profesor X no es ese alma de luz que se nos ha vendido durante décadas, al revelarse algún que otro profundo y oscuro secreto. También asistiremos al regreso del Juggernaut en una saga de dos números bastante maja que revelará nueva información sobre la gema de Cytorakk que le da sus poderes. Ahora bien, la ineficacia de Werner Roth para mostrar escenas de lucha espectaculares le resta puntos, en especial si recordamos el primer asalto a la mansión de Caín Marko dibujado por Jack Kirby.

Curiosamente, en este volumen tendremos dos héroes Marvel invitados. En la citada aventura de Juggernaut se dejará caer por aquí el Doctor Extraño, y en el regreso de Banshee será Spiderman quien haga acto de presencia. Se trata del último episodio de este volumen (el 35 USA) y es un disparate que llega a ser algo sonrojante, no solo por tener todos los tópicos habidos del cómic de superhéroes en el que dos personajes se encuentran y deciden pelearse antes de aclarar nada, sino porque la coherencia brilla por su ausencia. Da la sensación de que a Thomas le dejaban hacer lo que quisieran sin una mínima supervisión editorial. No es de extrañar que, unos años más tarde, la serie fuera cancelada.

A nivel artístico, además del trabajo del dibujante titular Werner Roth, encontramos un número bastante chulo que cuenta con lápices de Jack Sparling (con tintas de John Tartaglione) en el que la Patrulla-X se enfrenta a la amenaza del Brujo. Típico villano sesentero del que nunca más se supo. No es el único fill in, pues Dan Adkins también hace acto de presencia, realizando un trabajo más que correcto.

En definitiva, una vez te haces a la manera de contar cosas de un primigenio Roy Thomas, uno acaba disfrutando de manera moderada de estos números. A partir de aquí, veremos cómo la serie va remontando hasta la explosión creativa que supuso la llegada de Neal Adams al título.

Como siempre, los extras incluyen los contenidos de carácter facsímil de la Biblioteca Marvel, como el correo de los lectores o la reproducción de páginas de publicidad de la época y otros materiales, como textos extraídos de la edición en Masterworks, lápices de portadas no utilizadas o la sección “La era Marvel” escrita por Lidia Castillo.