Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Batman: Tiempo muerto

Batman: Tiempo muerto
Guion
Tom King.
Dibujo
David Márquez.
Color
Alejandro Sánchez.
Traducción
Francisco San Rafael.
Formato
Cartoné, 208 págs, color.
Precio
27,50€.
Editorial
ECC Ediciones. 2024.
Edición original
Batman: Killing time #1-6 (DC Comics).

A estas alturas de partido puede resultar un poco obvio, pero creo que es imprescindible puntualizar que Tom King se ha convertido en un autor muy polarizado al que odias, o amas. Luego estamos los que odiamos amarle y los que aman odiarlo, pero esa es una historia para otro momento… El caso es que ECC Ediciones ha publicado recientemente el tomo recopilatorio con una de sus últimas series limitadas, concretamente Batman: Tiempo muerto, la serie que escribió para David Márquez y Alejandro Sánchez, sobre un golpe muy bien planificado. Se trata de una serie con todos los tropos recientes del guionista, aunque tal vez llevados un paso más allá.


La obra gira en torno a un golpe planificado por el Acertijo, Catwoman y el Pingüino, pero está planteada de una manera muy particular: la acción se nos presenta a través de escenas muy cortas que continuamente avanzan y retroceden en el tiempo, formando un pequeño puzzle que comienza con la pieza central, pero a cuyo alrededor necesitaremos ir construyendo el resto de la imagen para conseguir una imagen global y conocer concretamente cómo empieza y acaba todo. Los propios cuadros de texto van situando el momento exacto en el que nos encontramos, facilitando así que el cambio de escenario nos permita saber en qué momento se encuentra. Los ladrones planean robar y vender una pieza concreta que no sabremos qué es hasta muy avanzada la historia.

El recurso de avanzar y retroceder en el tiempo para contarnos la historia, y de mostrarnos pequeños detalles no es nada nuevo para los que seguimos al guionista. La principal diferencia que vamos a encontrar es esa especificación tan pulcra y concreta de la línea temporal, y el sentido que tiene que el guionista haya decidido mostrarlo así. Como decía, a King se le puede amar u odiar y, cuando empiezas la lectura, ese planteamiento tan diferente y ese salto continuo en el tiempo desquiciará a los detractores y encandilará a los seguidores, porque además creo que encaja particularmente bien en una historia que gira  en torno a la planificación de un robo. Crea así una historia muy a lo Wes Anderson en el que cada cosa que sucede queda delimitada a un momento específico, que se nos transmite con una frase directa y con tono periodístico.


Fijaos que, a pesar de ser números de 28 páginas, se trata de una serie de tan solo seis números. Imagino que King es consciente de que ese recurso puede llegar a agotar al lector y que además la historia no da para muchos más rodeos, por lo que opta por una extensión más concisa que en sus otras obras recientes. Pero a pesar de ello… satura con el recurso. Creo que resulta inevitable que cuando llevamos tres números ya esa explicitación continua del momento y de las horas que han pasado entre una escena y otro acaba cansando, y más porque no es un recurso nuevo en este guionista. Intenta suplir ese procedimiento tan encorsetado aportando una variedad excepcional para la galería de villanos. Creo que King se planteó hacer su propio Silencio aunque, como esa obra, el resultado es tan espectacular visualmente como fallido en el apartado de guion.

Al menos esta obra sí tiene un punto a su favor en el excepcional dibujo de David Márquez, que no se limita a plantear meros pin ups y que complementa un acabado preciosista con una narrativa muy cinematográfica, sin ocultar su predilección por las viñetas horizontales. Además, está coloreado por Alejandro Sánchez, que aporta ese gama tan rica de colores, aunque con paletas muy homogéneas para cada página. El tándem resulta lo mejor de toda la obra.


En definitiva, Batman: Tiempo muerto es una serie que pretende hacer una historia fuera de continuidad, que repasa toda la galería de villanos del personaje, e incluso se permite ampliarla con dos nuevos personajes de nuevo cuño como son el Servicio y la malhablada Nuri Espinoza. Pero ese continuo giro de manillas del reloj, aun cuando entendemos qué sentido tiene en la historia, llega a ser algo cansino. Si consigues superar ese rechazo inicial por una estructura algo machacada por el guionista, no deja de ser una historia entretenida, que puede convertirse en esa obra por la que los nuevos lectores se pueden decantar a la hora de probar a empezar a leer a Batman.

Lo mejor: David Márquez y Alejandro Sánchez. Es una obra que deja ver a prácticamente toda la galería de villanos de Batman en algún momento, por lo que puede ser un buen punto de entrada para nuevos lectores.

Lo peor: Tom King necesita cambiar urgentemente su dinámica de escritura, se está empezando a repetir.