Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Bastardo, de Max de Radiguès

Bastardo, de Max de Radiguès
Guion
Max de Radiguès.
Dibujo
Max de Radiguès.
Formato
Rústica, 192 págs, B/N, 15x19 cm.
Precio
15€.
Editorial
Dibbuks. 2019.
Edición original
Bâtard (Casterman).

Pues nada más comenzar el año, Dibbuks nos trae su primera sorpresa editorial con este Bastardo, una obra del belga Max de Radiguès con la que ha sorprendido a crítica y público gracias a una historia policíaca tan sencilla como impactante. La obra se centra en un período de tiempo muy concreto, y con unos personajes que se nos van a ir presentando gracias a los diálogos y a sus propias acciones. Difícil que no se nos vengan a la mente infinidad de referencias, ahora las iremos comentando, pero a pesar de beber de muchas fuentes, cuenta con una personalidad propia avasalladora y que convierten a Radiguès en uno de los nombres a seguir en un futuro a corto plazo.


La historia nos presenta a May y Eugene, una madre y su hijo de unos doce años, que están escapando tras haber cometido uno de los 52 atracos simultáneos en la ciudad de Prescott (Arizona). Ambos intentan escapar de la policía, de cualquiera que pudiera reconocerles… pero también tendrán que escapar de algunos compañeros que no van a conformarse con su propio botín. May tendrá que hacer todo lo posible por proteger a su pequeño y, a ser posible, salir además con vida.

Lo primero que salta a la vista en cuanto empiezas a leer esta Bastardo es el estilo gráfico de Max de Radiguès. Tiene un dibujo de línea clara, muy sencillo, sin apenas fondos, y que da una primera impresión de no encajar con el tipo de historia que sabes que vas a leer. Además, usa un diseño de página clásico de 3×2 viñetas que contribuye aún más a ese aspecto intimista y conservador. Pero entonces empiezas a leer… y te das cuenta de la agilidad con la que vas pasando las páginas, atrapándote en su lectura y dando volumen a unos personajes que ocultan mucho más de lo que aparentan tras esa sencilla portada. Eugene es un buen chico, pero muestra una forzada madurez debido a la vida que ha llevado. May es una superviviente nata, y no dudará en hacer todo lo que sea necesario para salir adelante, aunque eso sea renunciar a su pasado, no poderse permitir el confiar en nadie y no tener nunca una sede fija.


Y aquí entran las referencias que comentaba al principio. Cuando uno lee Bastardo, se le viene a la mente el Balas perdidas de David Lapham, en cuanto al tono negro de la historia, y a cómo te cuentan solo un trozo de ella. Pero igualmente te vienen Pulp Fiction, Bonnie & Clyde o Thelma & Louise. Incluso me atrevería a citar Fargo, a pesar del clima radicalmente opuesto… El mérito de Radiguès recae en que te acaba contando la historia de May y Eugene en apenas quince o veinte escenas, permitiéndose además llevar más allá una simple historia de robos y huídas, dando una profundidad tremenda a los personajes. A medida que avanza la historia y vas averiguando detalles sobre su pasado, todo va cobrando un nuevo sentido, y las motivaciones pasadas y futuras van cambiando a los ojos del lector.

Esa mezcla de crudeza con la inocencia de su protagonista infantil es un arma de doble filo, pero el autor ha sabido conseguir el equilibrio que hace que la historia no se torne excesivamente sentimental y le reste dureza, pero sin embargo le aporta un tono tierno que contribuye a que temamos por los protagonistas y empaticemos con ellos, a pesar de que el retrato de la madre no la deja como un personaje amable. Radiguès no ha innovado y ha ambientado la trama en un escenario del sur de Estados Unidos, que hacen que conectemos mejor con la historia, gracias a las inevitables referencias comentadas. Es una decisión completamente comprensible, dado que aporta credibilidad a la obra, puesto que esos sucesos son bastante más raros en Europa y hubiera perdido algo de fuerza narrativa.

La obra ha sido galardonada con el Premio de los Institutos del Festival de Angoulême en 2018 (que confirma su aceptación entre un público juvenil) y el Premio SNCF de cómic policíaco del mismo año.


En definitiva, Bastardo.

Una obra que se devora casi de una sentada. Un cómic de género negro muy bien escrito, con una narrativa muy ágil y una caracterización de personajes brillante. Una historia de atracos a bancos y huidas como otras tantísimas que ya hemos visto y leído, pero que consigue mostrar una personalidad que la diferencia del resto, gracias a un estilo muy sencillo y a una optimización de recursos para dar volumen a sus personajes en un muy corto espacio de tiempo… y además consigue emocionar con su lectura y desarrollo. Una obra muy recomendable, con un precio muy asequible que la convierte en compra indispensable. Merece la pena.

Lo mejor: La sencillez de su dibujo y lo bien que aprovecha esos pocos recursos gráficos para construir una historia compleja.

Lo peor: Dejarse engañar por un estilo casi de aspecto juvenil y dejar pasar una gran historia de género negro.