Guardad las calculadoras. Por más que queramos rebuscar volúmenes de Amazing Fantasy y echar números, no estamos en el caso de Action Comics o Detective Comics y nunca vamos a llegar a sumar ese Amazing Fantasy 1000. Lo que sí se cumplió el pasado año fue el 60º cumpleaños de nuestro trepamuros favorito, el personaje que cerraría la cabecera que aquí se retoma en su decimoquinta entrega y la marcaría para siempre.
Y es que tengamos claro que lo que aquí se homenajea no es aquella serie que comenzó llamándose Amazing Adventures. Sin ningún tipo de duda, quien recibe aquí un merecido tributo es Spiderman y, para ello, se han traído a creadores de la talla de Armando Ianucci (Veep, La muerte de Stalin), Neil Gaiman, Olivier Coipel, Jonathan Hickman o incluso viejos conocidos como Dan Slott.
De este modo, lo que tenemos en Amazing Fantasy 1000 es una antología, tal como era la cabecera original, pero en esta ocasión compuesta de 9 relatos en homenaje al lanzarredes. Como toda antología, tiene picos y valles, luces y sombras, pero en conjunto crean una obra que satisface su labor como celebración de un hito y un icono.
Así, podríamos destacar la historia de un Spidey de 60 años que nos brindan Slott y Cheung, el relato autobiográfico de Neil Gaiman con Steve McNiven, la historia donde Hickman y Checcheto reflexionan con bastante humor sobre la suerte Parker o la secuela apócrifa de Busiek y los Dodson del Amazing Fantasy 15, pero no lo que pensáis, sino la continuación de Man in the Mummy Case!, otro de los relatos de aquella memorable entrega de la antología.
Como curiosidad, cabe mencionar que cierra el tomo con una historia homenaje al recientemente fallecido Mike Pasciullo, un veterano del departamento de marketing de Marvel. Se rescata para ello una vieja propuesta del propio Pasciullo para una miniserie que nunca se llevó a cabo, de la cual extraen Todd Nauck y Rachelle Rosenberg un fragmento al que ponen su arte y dan así el colofón final a Amazing Fantasy 1000.
Retoma Panini para este Amazing Fantasy 1000 el viejo lomo rojo rescatado del formato tradicional de la serie de Spiderman previo a su paso a grapa. Tal vez no se trata — como se oye por ahí — de una obra fundamental de vuestras bibliotecas Marvel y no tenga mayor trascendencia con el paso de los años, pero ¿quién no quiere un recuerdo de cuando asistió al sexagésimo cumpleaños de Spiderman?