En 2011 el desaparecido sello fundado en Italia pero coordinado desde España, 001 Ediciones, comenzó a editar (en formato reducido, más próximo a los Bonelli) una serie de espionaje que sigue editándose en Francia y ya lleva publicados 17 números, con el último recién aparecido allí. Lo hizo en tomos dobles que contenían 2 volúmenes originales por cada uno y llegaron a publicar 4 números. Ahora, la editorial cARTEm aprovecha para editar Lady S Integral 1, el primero de los tomos recopilatorios con cinco álbumes por cada tomo y su tamaño original. Una serie de espionaje, cargada de acción, giros de guion y cambios de localización a cada nuevo capítulo de su historia.
Suzan Fitzroy es la hija de un embajador norteamericano que actúa como secretaria personal del diplomático. Pero tras esa fachada de chica eficiente y dulce se esconde un pasado como ladrona estonia que escapó de su país dejando atrás la muerte de sus padres. Cuando alguien de su pasado vuelva, la llevará a sufrir un chantaje para que ponga sus habilidades al servicio de una misteriosa agencia secreta que, supuestamente, actúa contra el terrorismo. Suzan se verá obligada a colaborar, para evitar sacar a flote su pasado.
Cada libro contiene una historia autoconclusiva. Los dos primeros capítulos incluidos en este tomo integral sirven para presentar la historia de Suzan y familiarizarnos con todos los personajes: su padre el embajador y cómo llegó a adoptarla, un amigo de su dura infancia, el tipo que le asigna las misiones… y un sinfín de personajes secundarios que pertenecen a diversas agencias de espionaje de los diferentes países donde se desarrolla la acción: Belgica, EE.UU., Inglaterra, la URSS… La edición intregral resulta muy adecuada porque, a pesar de que las historias sean independientes, hay una trama río central que va desarrollándose en cada uno de los tomos, ampliando la información sobre el pasado de la protagonista.
El guion de Jean Van Hamme (Thorgal, Los maestros cerveceros) es bastante ambicioso, con numerosas ramificaciones y personajes que, al comenzar la lectura, y dada la publicación tan espaciada del cómic francés, pensaba que podía llegar a írsele de las manos y a incurrir en imprecisiones, pero nada más lejos de la realidad. La historia se mantiene cohesionada en todo momento, y el hecho de ir ampliando la información sobre el pasado tan paulatinamente la combina perfectamente con las tramas independientes de cada tomo, de un modo muy equilibrado que deja con ganas de seguir leyendo. Hasta los personajes secundarios tienen un papel importante, más allá de servir para conducir la acción de ciertas subtramas, y algunos de ellos cuentan con una participación continuada en números posteriores. Eso hace que la lectura tenga ese halo de una historia continua, y no capítulo al puro estilo James Bond en el que cada número se pueda leer de manera independiente sin miedo a perderse nada. No sé más adelante, pero de momento estos cinco números sí tienen que leerse de manera cronológica para no perderse en sus tramas.
El dibujo de Philipp Aymond llega en un momento en el que el artista ya llevaba más de diez años colaborando con el legendario Pierre Christin (Valerian, Lena), y ya cuenta con experiencia suficiente y soltura en los lápices. Destaca su estilo realista, dinámica composición de página, con rejillas originales, y un uso del color muy inteligente. Las escenas de acción están bien planificadas y sobresalen sobre el resto de la historia que, a pesar de estar monopolizadas por diálogos, no resultan tediosas ni lentas en ningún momento.
En defintiva, Lady S Integral 1 es una serie de espionaje apasionante que cuenta con un guion sólido, y muy buen asesoramiento para las subtramas de temas especializados. Con un ritmo equilibrado, presenta una historia que puede recordar a una versión conservadora de la serie de TV Alias, con cruces entre agencias de inteligencia, agentes dobles, y secretos entre diferentes bandos… pero también entre los del mismo. Sus tramas son bastante creíbles y elaboradas, demostrando la maestría de Jean Van Hamme como guionista y el dibujo realista de Aymond le dan el tono necesario al tipo de historias.
Lo mejor: El guion, muy compensado. Que desarrolle toda la trama en los primeros dos libros, pero luego mantenga pequeños detalles en cada libro que van enriqueciendo el background de los personajes. Los giros, que dan una nueva visión a ciertas subtramas o personajes.
Lo peor: Que una obra tan divertida y bien escrita como esta haya tardado tanto en llegar en una edición en condiciones a nuestro país.