Pese al clamor popular, Chip Zdarsky, manifestó recientemente en Reddit que no planeaba hacerse cargo de Amazing Spider-man, la serie principal del trepamuros, ya que no parece tener ninguna intención de ponerse bajo la presión de todas las miradas del fandom. Sin embargo, sí lo tenemos de vez en cuando en series como Spiderman: Toda una vida o este Spiderman: La sombra de la araña, con las que estaría cubriendo un hueco que hacía tiempo que necesitaba ser llenado.

A la hora de recomendar un punto de entrada para nuevos fans, con Spiderman siempre nos hemos visto obligados a recomendar etapas enteras larguísimas, fragmentos de etapas que no se terminan de sostener solos o tirar al recurso de La última cacería de Kraven, que por más que sea una joya, es la historia de Spiderman menos Spiderman que se me pueda ocurrir. Tradicionalmente Spiderman se ha planteado como un personaje de largo recorrido, que más allá de tramas y villanos, funciona por interacción con su entorno, sus secundarios y los devenires de la vida de Parker, más que por un relato concreto y puntual la batalla con el malo de turno. Sin embargo, este tipo de relatos contenidos son esenciales para recibir nuevos fans y el lanzarredes nunca ha estado especialmente bien surtido, tal vez porque es muy complicado presentar un contexto en pocas páginas con el nivel de complejidad que requiere el personaje, pero Chip Zdarsky parece haber dado con la solución: historias contenidas con contextos preconstruidos en otras historias. Con Toda una vida ya pudo pisar el acelerador apoyándose en variantes de acontecimientos y personajes presentados y construidos en otras historias — muchos de ellos parte ya del acervo popular — y en el caso de este What if tiene la oportunidad de repetir muletilla .

Spiderman: La sombra de la araña ya nos viene directamente con el antetítulo What if? y es que esta cabecera de finales de los 70 vuelve a estar en primer plano con los devenires del universo cinematográfico, pero reconvertida esta vez no tanto en una serie, como en un sello — semejante al difunto Elseworlds de la Distinguida Competencia — que permite historias de varios números, más complejas y expansivas.

Spiderman: La sombra de la araña nos lleva de regreso a 1984, cuando el lanzarredes volvía de las Secret Wars con un extraño traje negro que respondía a su voluntad. Los hechos que nos cuentan Zdarsky y Pasqual Ferry comienzan de modo similar a los que en su día nos contaban Tom DeFalco y Ron Frenz, pero poco a poco, lo que se descubriría como el simbionte alienígena que daría lugar a Veneno en la continuidad oficial, irá haciendo crecer la agresividad en Peter Parker hasta dominarlo por completo con trágicas consecuencias. Esta misma historia ya fue contada en What if…? Vol.2 #4 USA en 1989, pero tanto el tratamiento como el detenimiento con el que se trata el asunto no tiene absolutamente nada que ver.

Aún así, cosas de tener que contarlo todo en 5 números, en muchos momentos ciertos cambios de actitud se antojan demasiado repentinos y no muy creíbles, pero se entienden como parte del código y de la extensión de la obra, con lo que no son especialmente sangrantes. Tal vez el personaje mejor trabajado de la historia sea J.J. Jameson, al que sabemos que Zdarsky tiene un especial cariño, pero más allá de Peter son también claves las figuras de Mary Jane, tía May, los 4 Fantásticos o — ya veréis cómo — Eddie Brock.

Cuando abrimos Spiderman: La sombra de la araña vemos a un Pasqual Ferry tal vez algo más sintético de lo que pudimos ver en Thor o Ultimate Fantastic Four, pero seguimos viendo a ese mago del diseño de gracia neoplasticista y con ese acabado tan peculiar que mezcla la rotundidad de unas tintas finales con la soltura de un boceto. Toda la propuesta, desde los fondos a las figuras y las mismas calles entre viñetas y disposición de las mismas ofrece ese aspecto de precisión que advierte todo un trabajo previo de concepción antes de poner las líneas sobre el papel o la pantalla del ordenador. El gran problema de su peculiar estética y puesta en escenas es que en cuanto se baja el listón por las prisas o en este caso suponemos que por los problemas de salud que ha tenido en los últimos tiempos el artista, los cimientos se desmoronan y lo que antes era perfección ahora es rigidez, sensación de vacío y frialdad y es que, si bien los primeros números tenemos a ese Pasqual Ferry que sigue siendo uno de los artistas españoles más grandes que ha importado el cómic USA, a medida que avanzan los números vamos viendo menos mimo en el trabajo y lo que tendría que ser el clímax final, queda un tanto deslucido.

En cualquier caso y más allá de sus altibajos, 100% Marvel HC. What If…? Spiderman: La sombra de la araña, sigue siendo una historia recomendable, que funciona de manera autónoma y podría ser una opción para quien quiera familiarizarse con el trepamuros.