Si le preguntas a un lector de cómic superheroico cuál es su superheroína preferida del Universo DC, la inmensa mayoría responderán casi sin pensárselo que Wonder Woman, la primera gran mujer del género y miembro de la Trinidad. En cambio, en el Universo Marvel la cosa no está tan clara. La franquicia mutante tiene bastantes candidatas, como Jean Grey, Tormenta o Pícara. Dentro de los Vengadores encontramos también a Hulka o a la Bruja Escarlata. Pero hay un personaje que, con más de cincuenta años a sus espaldas ya, ha ido escalando puestos gracias al buen hacer de los autores que se han encargado de ella en los últimos años, llegando para algunos como el que suscribe al primer puesto. Hablamos, por supuesto, de Carol Danvers, la Capitana Marvel, cuya etapa escrita por Brian Reed en los años en los que aún era conocida como Ms. Marvel está recopilando Panini.
Uno de los grandes aciertos que tiene Brian Reed en esta etapa es poner el foco en la persona en lugar de en la superheroína. Aunque el título de la colección editada entre 2006 y 2010 era Ms. Marvel -aún estaba por llegar el cambio a Capitana Marvel- las andanzas superheroicas del personaje son algo bastante secundario. La primera mitad del tomo nos lleva al pasado de Danvers, a un momento que le define como personaje pero no se ha explorado hasta estos números con la crudeza que se merece. El ataque de Pícara a Ms. Marvel, cuando la primera aún era una villana, despojó a Carol de sus recuerdos, que le fueron reimplantados gracias al Profesor Xavier, pero ha quedado emocionalmente aislada de ellos. Su padre está terminal y uno de sus hermanos falleció tiempo atrás, pero no consigue tener ningún tipo de reacción ante esas situaciones. Aprovecha el guionista para mostrarnos también escenas del pasado pre-superheroico de Danvers y vemos que no proviene precisamente de una familia feliz.
Nos vamos justo después a una misión que empieza en el pasado de Carol y cuyos ecos llegan hasta el presente. Seguimos sin encontrarnos a la heroína disfrazada: Brian Reed se centra en la Capitana Carol Danvers de las Fuerzas Aéreas de los Estados Unidos, en una misión de espionaje, en torturas, en supervivencia. Vemos a Carol disfrazada en contadísimas ocasiones y no lo echamos de menos: aquí tenemos a un personaje tridimensional y por él consigue el guionista que nos interese lo que nos está contando.
Pero claro, esta serie pertenece a una época en la que Marvel empalmaba un evento con otro, cada nuevo crossover venía a cambiarlo todo para siempre. Un “para siempre” que duraba aproximadamente un año y medio, hasta que el siguiente entorno editorial llamaba a la puerta. Y si en el tercer volumen de esta serie todo estaba marcado por Invasión Secreta, aquí le toca a su secuela, Reinado Oscuro, la época en la que había una alineación de Vengadores dirigida por Norman Osborn y formada por supervillanos. Los últimos números de este volumen están protagonizados por la Ms. Marvel de Osborn, Karla Sofen, previamente conocida como Piedra Lunar.
En este tomo nos encontramos con dos problemas importantes, aunque no tanto como para darle una valoración negativa. El primero es el mal endémico del cómic superheroico del S.XXI: la inestabilidad artística. En la época de Reinado Oscuro nos encontramos en la serie de Carol Danvers con nueve dibujantes para un total de once números. Sólo hay un autor que dibuje más de dos números en el tomo, Pat Olliffe, con la increíble cantidad de tres. De las consecuencias de cambiar de artista a cada mes ya hemos hablado en otras ocasiones, y visto las tendencias del género en los últimos tiempos, quejarse de ello tiene el mismo efecto que gritarle a las nubes.
Siguiendo en el apartado gráfico, hay que decir que el traje de Ms. Marvel en esta época, visto con ojos de hoy, resulta un poco rancio. Es una lástima que un personaje tan bien definido como Carol Danvers tuviera que pasear un atuendo tan hipersexualizado. Afortunadamente, no mucho después fue sustituido por el actual uniforme de Capitana Marvel, mucho más digno y visualmente mucho más potente.
Comentábamos hace unos meses que la serie de Brian Reed es la colección protagonizada por Carol Danvers que ha alcanzado una numeración más alta. Y, la verdad, es algo totalmente comprensible. Es una lectura ágil y entretenida con una protagonista fuerte, dura y tridimensional. Con buenas historias y buenos personajes da gusto leer cómics. ¿Algo malo que decir de este tebeo? Sí, una cosa. Siendo una reedición, sabemos que ya sólo nos queda un tomo más a los que nos saltamos esta serie en su día. Una lástima.
