Me temo que tal vez llego un poco tarde para decir que Kelly Thompson y Elena Casagrande son las próximas estrellas de la Casa de las Ideas. No es solo el trabajazo que hacen con esta nueva serie regular que arranca con Viuda Negra. Los lazos que unen, justo cuando está a punto de estrenarse la peli, sino que mirando la gráfica de sus respectivas carreras es obvio que tenemos una curva ascendente.
Ya nos fijamos en Kelly Thompson hace un par de años cuando apenas llevaba cuatro años trabajando en los cómics. Había escrito un par de novelas antes, pero desde 2015 ya comenzaron a surgirle encargos en Marvel al tiempo que se curtía en las independientes con Jem and the Holograms o Descorazonada. Poco a poco los encargos irían subiendo en enjundia, probablemente aupada por el éxito de culto que fue su Ojo de Halcón y en la actualidad ya es sin duda una primera espada a punto de comenzar una nueva etapa en Spiderman.
A la romana Elena Casagrande le ha costado un poco más saltar al primer plano. Son ya catorce lo años que lleva trabajando para el mercado USA, fundamentalmente en tebeos de franquicias como Star Trek, Angel o Doctor Who. Tal vez su trabajo de mayor recorrido de entre lo que hemos podido ver en España sea Riesgo Suicida, pero ha ido saltando de pequeño encargo en pequeño encargo durante un montón de tiempo y mejorando día a día hasta recaer en este Viuda Negra. Los lazos que unen en el que la podemos ver desatada.
Con este equipo en un momento de forma espectacular arrancamos Viuda Negra. Los lazos que unen, el primer arco de una nueva serie regular, que nos servirá para redefinir y afianzar aún más al personaje. Tras volver de una misión, se pierde la pista de Natasha Romanoff durante nada menos que tres meses y cuando por fin parecen haber dado con ella, se llama Natalia Grey, es arquitecta, está prometida y tiene un hijo de un año ¿Cómo es esto posible? Tendremos que acompañar a Natasha (o tal vez Natalia) y a la extraña pareja formada por Ojo de Halcón y el Soldado Invierno para averiguarlo.
Lo sabemos, ya son muchos años leyendo superhéroes y ya sabemos que detrás habrá algún villano o alguna oscura trama del tipo que sea. Viuda Negra. Los lazos que unen que unen es un tebeo de superhéroes y conocemos de sobra cómo funcionan ciertos tropos, pero incluso aunque intuyamos el final (y no todo el final, creedme), tal vez el juego no trate de eso y el equipo creativo se vuelque en darnos las dosis justas para nos importe más cómo llegaremos a él antes que la propia conclusión en sí y, sobre todo, qué Viuda tendremos a partir de entonces.
Viuda Negra. Los lazos que unen se basa en dos grandes pilares, que son al fin y al cabo dos de los pilares del género: el trabajo de personajes y la acción. Por suerte, el primero es el punto fuerte de Kelly Thompson. Tenemos dos Nat diametralmente opuestas: una superespía y una arquitecta madre de familia y, sin embargo, podemos ver en ambas a la misma persona, una Nat que puede ser a la vez cálida e implacable. La dinámica entre Ojo de Halcón y Soldado Invierno es todo lo que debió ser Falcon y el Soldado Invierno y desafortunadamente nunca llegó a ser. Pese a ser secundarios en esta historia tienen momentos de buddy movie memorables y hasta los villanos están tratados deliciosamente, con ese sentido del humor discreto y preciso y ese ingenio de los diálogos de Kelly Thompson.
Obviamente, para llevar un trabajo de personajes como este a buen puerto es imprescindible un trabajo gráfico de acting a la altura y Casagrande responde completamente a las expectativas, pero decíamos que la otra pata de Viuda Negra. Los lazos que unen es la acción y aquí es donde se sale por los cuatro costados. Hay un esfuerzo evidente por parte de Elena Casagrande por destacar en este aspecto y llevar ciertos experimentos gráficos a puntos que no le habíamos visto hasta ahora. Puede ser incluso que llegue a asumir en ocasiones riesgos excesivos de los que no siempre sale airosa al 100%, rozando una cierta confusión en ciertos momentos, pero nunca empañando la sensación general de intensidad y cinética.
Juntas hacen de la premisa Viuda Negra. Los lazos que unen la situación límite, el extremo que por contraste definirá lo que es la Viuda, para desde ese punto redefinirla y afianzarla, haciendo de este tomo un nuevo punto de partida realmente prometedor.
