Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Un tipo duro, de Jeff Lemire

Un tipo duro, de Jeff Lemire
Guion
Jeff Lemire
Dibujo
Jeff Lemire
Formato
Rústica, 272 páginas
Precio
26 €
Editorial
Astiberri. 2018
Edición original
Roughneck USA

Nueva obra de Jeff Lemire, y nos hacemos la pregunta de siempre. ¿Será del Lemire bueno o del Lemire malo? Después de más de diez años siguiendo al autor, ya hay una cierta intuición según el registro en el que se mueve. Lo que hemos acabado viendo es que cuanto más libertad tiene y menos tiene que ceñirse a imposiciones editoriales, mejor suele ser su resultado. Se suele decir que se mueve mejor en entornos realistas y peor en los superhéroes, pero viendo la maravilla que está haciendo en Black Hammer tenemos que decir que también sabe tratar personajes con capas. Donde brilla especialmente es cuando trata temas como la alienación o el aislamiento, tanto físico como emocional, independientemente del género en el que se mueva. Así, obras como Essex County (realista), Sweet Tooth (ciencia ficción) o Black Hammer (superhéroes, más o menos) se encuentran entre lo mejor que ha producido el canadiense.

Entonces, ¿qué podemos esperar de Un tipo duro? Pues mirando la portada vemos un hombre solo caminando por la nieve hacia un bosque, y además es un producto del sello Gallery 13 de la editorial Simon & Schuster, un sello bajo el que se han publicado un total de tres novelas gráficas en más de treinta y cinco años, con lo que queda claro que no hay presión por continuidad y línea editorial como ocurre en Marvel o DC. Las características de esta obra en un primer vistazo nos hacen pensar que podemos estar en el terreno en el que mejor se mueve Lemire, ¿verdad?

un tipo duro roughneck

Un tipo duro

Pues así es. El autor ambienta esta nueva obra en Pimitamon, un pueblo ficticio en el interior de Canadá, y nos presenta como protagonista a Derek Ouelette, un tipo que fue una promesa del hockey sobre hielo en su juventud pero por algún motivo su carrera deportiva se fue por el retrete y su vida detrás de ella. Su hermana reaparece en su vida después de años separados, convertida en un despojo humano, víctima de abusos domésticos y convertida en una drogadicta. Derek no es capaz de cuidar de sí mismo, pero se ve obligado a hacerse cargo de su hermana. Así, el reencuentro de los dos hermanos se acaba convirtiendo en una especie de segunda oportunidad, una ocasión de enderezar unas vidas que se torcieron hace mucho.

Aunque no sea una historia autobiográfica, sí que hay partes de la vida del propio Lemire en esta historia. La omnipresente sensación de soledad y la obsesión por el hockey son recuerdos, según ha comentado el autor en alguna ocasión, de su infancia en Woodslee, un pueblecito de poco más de mil habitantes dentro del Condado de Essex, en Ontario.

El ritmo pausado que se toma para contar la historia es característico del autor. En unos tiempos en los que la expresión decompressive storytelling es lo más parecido a una palabra malsonante que se puede decir hablando de narrativa, Lemire utiliza esa técnica con una espectacular maestría. Si hay páginas en las que no ocurre nada, tiene un sentido en la historia, en el ritmo, en la creación de atmósferas y de caracterización de personajes. No es como en el caso de otros autores, especialmente dentro del mercado superheroico de las majors, que lo utilizan para rellenar más páginas con la misma cantidad de historia, haciendo más bien un diluted storytelling.

un tipo duro 1

En el aspecto meramente técnico, Un tipo duro se mueve simultáneamente en dos líneas temporales, el deprimente presente de los dos hermanos y un pasado aparentemente utópico que es la semilla de su situación actual. Se reconoce a simple vista el momento de cada escena por el uso del color, que en las escenas del presente se limita a dar volúmenes con acuarelas de un tono azul grisáceo que aumenta la tristeza omnipresente que flota por encima de toda la obra, y en las del pasado son a todo color, dándole una viveza a las páginas que contrasta con el aspecto apagado y opresivo del resto de páginas.

En resumen…

Si ya has leído obras anteriores de Lemire como las mencionadas Essex County o Black Hammer y te ha resonado de una forma especial dentro, Un tipo duro funciona de igual manera. Si sintonizas con esta temática, vas a disfrutar con esta obra igual que con las anteriores. Pero si simplemente le reconoces un cierto oficio sin más, si las sensaciones que explora no te provocan una reacción visceral, pensarás que Un tipo duro es una novela gráfica correcta, pero que esto ya te lo ha contado antes. Así que, en definitiva, estamos ante una obra imprescindible para los seguidores de Lemire (del Lemire bueno, vamos), aunque sea un terreno previamente transitado por el autor, y al que volverá de nuevo en su más reciente Royal City.