ECC nos trae el segundo tomo con los últimos 6 números de la serie de Steve Orlando dedicado a Midnighter, el héroe nacido en las páginas de la ahora renacida Wildstorm. Un tomo con el título Apolo, que se incorpora en los últimos números aquí contenidos. Viendo este tomo y el anterior en conjunto, me quedo con una sensación agridulce. Tengo la impresión de que esta serie no ha tenido la suerte que se merece, y que ha pasado mucho más desapercibida de lo que debería. Steve Orlando ha hecho un buen trabajo. No es fácil escribir una serie sobre un personaje que parece ser una mezcla de Batman y Lobezno, y con unos poderes que lo hacen casi invulnerable. Escribir una serie en la que un personaje que es capaz de predecir todas las posibilidades de una pelea y que además puede curarse de manera acelerada, sin tener ninguna debilidad conocida, no es tarea fácil. Piénsalo bien, imagina historias de este personaje… Orlando nos ha traído 12 números bastante interesantes, con una serie de giros argumentales y un planteamiento de situaciones que dejan con muy buen sabor de boca.

La historia.

Retomamos la historia en el punto que dejamos el tomo anterior, donde descubrimos que ese personaje que había estado acompañando a Midnighter en los primeros números de la serie no era otro que Prometeo, el luchador definitivo y una verdadera amenaza para Midnighter. Concluida esa historia nos encontramos ante un número en el que Midnighter se tendrá que enfrentar a una misteriosa amenaza con animales fusionados y después tenemos un arco argumental de 4 números en el que se cierra la serie y donde Midnighter tendrá que ir a recuperar un artefacto que se encuentra en posesión de nada menos que Amanda Waller y su Escuadrón Suicida. Esta trama traerá de vuelta a algunos personajes del pasado del protagonista, como el que da título al tomo.

Los autores.

Toda la serie ha sido escrita por Steve Orlando. Mi sensación en conjunto es que ha hecho muy bien su trabajo. De hecho, su manera de tratar al Escuadrón Suicida me ha gustado muchísimo. Viendo los últimos años del grupo hay que reconocer que, a pesar de ser un grupo de malotes, el tono general se ha edulcorado un poco, y tal vez se pueda echar de menos un poco de suciedad en sus aventuras. Orlando lleva esto muy bien. Las peleas son duras, sucias, y se ve a los miembros del grupo hacer un trabajo que solo ellos pueden hacer, sin remilgos, sin contenerse. Además, los editores le han permitido un tono especialmente violento a la serie, lo cual encaja perfectamente con el personaje, que no se corta a la hora de pelear y revienta los cráneos que tenga que reventar.

Tiene escenas de diálogo especialmente potentes, y plantea muy bien algunas escenas y le da épica a varias batallas: Prometeo, Afterthought, Deadshot… A pesar de los poderes de Midnighter consigue generar esa sensación de peligro para el personaje y nos ambienta toda la historia en un entorno hostil y muy violento.

El dibujo sigue recayendo en gran medida sobre ACO, con la ayuda del español Hugo Petrus (Dr. Extraño, Lobezno) para complementar cuando no llegaba a tiempo, y un número que es dibujado por completo por el italiano David Messina (Ultimate Comics, Catwoman, Star Trek). Ya comenté en el anterior tomo que el dibujo de ACO me parece muy atractivo, con ese estilo similar a Sorrentino, con ese abuso consciente de las viñetas de detalle. Le da un toque que le sienta muy bien a la serie, aunque tengo que reconocer que cuando llevas 12 números viendo ese estilo, puede llegar a cansar un poco. Pero tiene algunas páginas espectaculares, como las del segundo enfrentamiento con Afterthought o del cara a cara con Deadshot. Sensacionales.

Petrus hace un dibujo que busca la uniformidad gráfica, y está algo encorsetado, tengo la impresión de que no ha tenido mucha libertad a la hora de dibujar, y es comprensible porque en muchos números alternan páginas continuamente (dos uno, dos el otro, dos una y dos el otro).

Diferente es el trabajo de Messina, que tiene más libertad y hace un dibujo diferente, con una narrativa mucho más clásica y sin introducir casi ninguna viñeta detalle.

En definitiva, Midnighter. Apolo.

Midnighter 2 nos permite completar una serie muy interesante. Con un tono mucho más violento (quién lo iba a decir) que la de Ennis, Giffen y Sprouse que publicara Norma, cuando el personaje continuaba en Wildstorm, Orlando ha mezclado al violento exmiembro de grupos como Stormwatch y Authority con lo más granado del Universo DC. Habrá que ver de qué es capaz el guionista con las aventuras de Supergirl tras Rebirth, le seguiremos muy de cerca.

Midnighter: Apolo contiene los números 7 a 12 de la serie original americana. ECC nos la trae en un tomo con encuadernación rústica, de 136 páginas a color por un precio de 12,95€.

Lo mejor: El tono violento y sucio de Orlando. Los enfrentamientos con Afterhought y Deadshot.

Lo peor: El estilo de ACO satura a veces y llega a ser repetitivo, a pesar de su espectacularidad.

Para fans de Midnghter. Para los que gusten de un tono más violento y sucio en las historias de superhéroes. Para los que echan de menos a Wildstorm.