Dientes apretados. Piernas interminables. Posturas imposibles. Músculos hipertróficos. Enemigos desproporcionados… ¡Son los 90! ECC Ediciones inicia con El torneo una serie de tomos dedicados a los Grandes Autores de Wonder Woman, del mismo modo que ya ha hecho con Batman o Superman. El torneo recopila los últimos números de la etapa de William Messner-Loebs donde por fin pudo contar con un dibujante regular, en este caso Mike Deodato Jr. En este tomo vamos a poder leer unos arcos argumentales que funcionan muy bien como tomo recopilatorio pues, a pesar de ser la última parte de la etapa, contienen un arco de presentación que sirve de planteamiento de la historia, un nudo con una historia de relleno pero que va plantando las semillas para el desenlace del último arco, con mucha espectacularidad y cerrando todas las tramas planteadas desde los primeros números aquí recogidos. Eso sí, ¿os acordáis cuando hablaba de Mike Deodato en sus primeros números en Amazing Spiderman tras la salida de JRJr? Aquí está el que recoge todos los vicios de los 90 y que ahora analizaremos con todo lujo de detalles.
La historia.
La historia comienza con Diana volviendo a Themyscira después de una muy larga ausencia. A su llegada se encuentra con su madre, muy distante y con bastante rencor acumulado por lo que considera un abandono a sus hermanas. Circe había atacado Themyscira tras la partida de Diana y las había teleportado a una dimensión demoníaca donde lucharían durante años, aunque en la Tierra solo hubieran pasado unos meses. A medida que avanza la historia comenzaremos a ver escenas del pasado de Hipólita y el nacimiento de Diana, la relación de la reina de las amazonas con Heracles o Antíope. Hipólita sugerirá convocar el torneo que servirá para revalidar el cargo de Wonder Woman y la cruel Artemisa luchará con todas sus fuerzas por el cargo. El resto de las historias contenidas en el tomo serán de nuevo en la Tierra, concretamente en Boston, donde había centrado toda la acción el guionista en los números anteriores, y contará con una disputa entre mafiosos y acabarán involucrados personajes como Cheshire, Cheetah, Poison Ivy o el mismísmo Joker. El arco final sirve de desenlace de toda esta historia que se había ido desarrollando, y de explicación de la actitud que había mostrado Hipólita en el arco con el que se abre este tomo.
Los autores.
William Messner-Loebs escribe el final de su etapa en la serie. Un guionista venía de una etapa bastante digna en Flash, y en la que al igual que ha pasado con la actual serie de TV, prescindió del tono oscuro que dominaba en la editorial tras la popularidad de las etapas de Miller o el Watchmen de Moore e hizo una etapa muy colorida en la serie del velocista. Su aterrizaje en Wonder Woman era muy apropiado, aparte de por la calidad demostrada, por ser un guionista que siempre ha luchado por la igualdad y por el sitio de la mujer en la sociedad. De hecho, cuenta con la curiosidad de que su apellido de soltero es Loebs, por lo que, al igual que pasa en casi todas las sociedades occidentales en las que una vez casados, los hijos o esposas van a tener primero el apellido del hombre, él decidió hacer lo contrario. Chapó por él, sí señor. También ha escrito series como Johnny Quest, el fantástico Elseworld de Wonder Woman Amazonia o uno de los pocos fill-ins que Planeta se dejó sin editar del Green Arrow de Judd Winnick, en una historia en la que el arquero se enfrentaba a Solomon Grundy.
Su papel como guionista de estos números es bastante acertado en cuanto a que se permitió diseñar todo el camino hacia su despedida, con una historia que, pese a ser muy digna de su época, estaba bien construida. Lo único que me saca muchísimo de la lectura es su afición a acabar cada número con un potente cliffhanger y cuando empiezas a leer el siguiente… la acción ha avanzado y el desenlace de todos esos cliffhanger quedan resueltos en una elipsis narrativa. Por ejemplo, en un número Diana es atacada por sorpresa por Cheetah. Saltas corriendo al siguiente número esperando encontrarte la pelea… pero directamente pasa a una escena en la que Diana está atada, tras (supuestamente) haber sido derrotada por su enemiga. Messner-Loebs abusa, en mi opinión, de las elipsis. No solo en los cliffhanger sino también en los diálogos, como por ejemplo cuando discute con Hipólita y vuelve a la Tierra tras el torneo… y ya se ha resuelto y no explican demasiado cómo queda la situación en cuanto a poderes, reacción de Hipólita… la acción pasa ahí sin volver a Themyscira unos cuantos números después.
Pero si esos pequeños defectillos de Messner-Loebs se ven compensados por una estructura de historia completa extremadamente satisfactorio, al bueno de Deodato poco vamos a poder sacarle de justificación. Bueno, sí, que eran los años 90, que Image partía el bacalao y que los dientes apretados y las posturitas molaban mucho. Se me ha hecho duro. Ver el dibujo de este tomo es ver a Lee, Silvestri… ¡incluso al gran Rob! Y Messner-Loebs no le ayudaba mucho, todo hay que decirlo. Vale que metas a Poison Ivy o el Joker, pero cuando enfrentas a tus heroínas a gente como El machista, El explotador, o a Involuto el conquistador… pues te expones a lo que te expones. Y eso que no voy a hablar de Geoff y Moot. Dibujo muy noventero pero, oye, lo mismo te gustaba en su día y lo echas de menos.
Lo opuesto al estilo noventero de Deodato se encuentra en las espléndidas portadas de Brian Bolland, un auténtico deleite para la vista, y que son un clásico tras otro.
En definitiva, GAWW El torneo.
Una historia entretenida, muy variada, en la que lo mismo ves la vuelta a la mitología, que enfrenta a Wonder Woman con la mafia de Boston o con supervillanos clásicos de toda la vida. Un dibujo que llega a hacer daño a la vista, pero que hay que comprender con el contexto histórico de una época en la que ese dibujo vendía. Por suerte, Deodato acabaría adoptando otro estilo como el que podemos ver en los Marvel Saga Spiderman actuales. Curioso el personaje de Artemisa, de la que se llegaría a publicar una miniserie escrita también por Messner-Loebs, y que nos plantea a la versión más agresiva de las amazonas, en contraste con la nobleza de Diana.
ECC edita este El torneo en un tomo cartoné con 312 páginas a un precio de 30€. Contiene los números 0 y 90-100 (este último, doble) de la serie original americana.
Lo mejor: Lo variado de los enemigos del tomo. Cómo planta las semillas para el final desde los primeros números. Las portadas.
Lo peor: Si te superaban los cómics de los noventa, no lo intentes.
Para fans de Wonder Woman. Para los que disfrutaban con el dibujo de Rob Liefeld o Jim Lee en la Image inicial. Para los que quieran leer una etapa contenida con una historia que se puede leer sin problemas independientemente.