Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Reseña: Los Panzer de la muerte.

Saludos, lectores. Hoy tenemos la reseña de un tebeo antibelicista. Toca echarle un vistazo a Los Panzer de la muerte.

Estamos ante una adaptación de la novela de Sven Hassel, dibujada por Jordy Diago. Una adaptación muy buena que mantiene y respeta el espíritu de la obra original.

Antes de nada, permitidme que os comente unas cosillas sobre las novelas. Allá por 1953 se publicó La Legión de los condenados. Iba a ser una novela única y cerrada, pero su éxito hizo que Hassel siguiera escribiendo. Pero no estamos exactamente ante una saga, sino que sus historias son más bien cuentos sueltos, escenas de un enorme tapiz. Esto hace que haya algunas incoherencias como personajes vivos que habíamos visto morir en libros anteriores o unidades que están en dos frentes diferentes a la vez.

¿Importa esto para transmitir el mensaje del autor? Para nada. Nos va a quedar claro que la guerra es el infierno.

Los Panzer de la muerte (Die Galgenvögel en su titulo alemán) empieza en medio de una guerra, con una ciudad bombardeada. No vamos a encontrar épica ni aventuras gloriosas en una novela que empieza con un colegio cubierto con fósforo. Estamos avisados de lo que viene.

Tenemos aquí las primeras páginas para echarles un vistazo.

Panzer

120 páginas. Tamaño 21X29,7. Rústica19,90 €

Jordy Diago se las apaña para transmitirnos muerte, horror y desesperación sin caer en el gore o en los detalles macabros. Una mano negra contra un fondo rojo nos transmite lo que está pasando mejor que el dibujo de cuerpos carbonizados.

El guión nos cuenta días sueltos de la vida de un pelotón de soldados en el Frente Ruso. El más salvaje de los frentes de la 2 Guerra Mundial. Sin reglas, sin ley, sin piedad.

Seguiremos a Porta y a los demás a través de esta guerra. No todo serán combates, sino que podremos verlos intentando jugar a las cartas, comer, emborracharse. Pero siempre pendientes del siguiente asalto soviético o la siguiente escaramuza. Vivir el momento porque no va a haber un mañana.

La historia avanza con Porta y su sombrero de copa. Lo seguimos como un punto de referencia en un mundo sin sentido. La historia empieza de golpe, sin un resumen de nada, sin presentarnos a los personajes. Si este es nuestro primer contacto con el Viejo y los demás, seremos como un soldado recién llegado que los irá conociendo sobre la marcha.

Panzer

El dibujo nos transmite una idea de abatimiento, de tristeza. No esperéis un dibujo hiperrealista, con todos los detalles de las armas trasladados al papel.  Es un dibujo no muy definido, como si viéramos las cosas a través de una cierta niebla.

La obra está dibujada a color, pero priman los grises y los colores oscuros. Tendremos mucho rojo y amarillo. fuego y llamas.

Y tenemos a Porta con su sombrero y su monóculo. Su pelo y su sombrero están casi siempre iluminados en un amarillo anaranjado que nos guiará los ojos. Será una especie de guía visual.

No veremos mucha sangre. Pero veremos el fuego de los lanzallamas y las llamaradas de los tanques disparando. También veremos detalles no del todo exactos a nivel militar. Pero eso no nos va a importar. Lo importante es esa atmósfera de locura y muerte. Además, si lo perdonamos en las película bélicas, aquí también :-).

panzer

Me acerqué a esta obra con curiosidad y ha resultado ser una magnífica adaptación. No es una historia para todo el mundo ni para leer todos los días, pero cumple perfectamente con su misión: Adaptar la novela y mantener su mensaje.

¿Por qué leer Los Panzer de la muerte?

Refleja perfectamente el espíritu de la novela. Narra una locura sin caer en el recurso fácil de la sangre o lo macabro. El detalle del sombrero de Porta me ha encantado.

¿Por qué no leer Los Panzer de la muerte?

Es una historia dura. Buscas entretenimiento. Buscas un dibujo realista y muy detallado.

Y me permitiréis que cierre esta reseña citando (seguramente mal) a Heródoto de Halicarnaso: Ningún hombre es tan tonto como para desear la guerra y no la paz; pues en la paz los hijos llevan a sus padres a la tumba, en la guerra son los padres quienes llevan a los hijos a la tumba.