Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Las Aventuras de Archer y Armstrong: En el saco

Las Aventuras de Archer y Armstrong: En el saco
Guion
Rafer Roberts
Dibujo
David Lafuente
Tinta
Ryan Winn
Color
Brian Reber
Formato
Rústica, 112 págs. Color
Precio
12,95€
Editorial
Medusa Cómics . 2017
Edición original
The Adventures of Archer and Armstrong #1-4 USA (Valiant)

Desde que la nueva Valiant dio el pistoletazo de salida con aquello llamado Summer of Valiant en 2012, Archer y Armstrong habían sido feudo exclusivo de Fred Van Lente. Junto a dibujantes como Clayton Henry, Emanuela Lupacchino o Pere Pérez, tomó los personajes que creara el mítico Barry Windsor Smith en 1992 y les daría una vuelta para darnos la que con toda probabilidad es la serie más loca y divertida de todo el universo Valiant.

Sin embargo, Valiant juega a lo mismo que Marvel y DC y de vez en cuando toca rotación de equipos, así que es el turno de Rafer Roberts y David Lafuente para dar inicio a una nueva etapa en la vida de esta extraña pareja.

A Lafuente ya lo conocemos de sobra. Después de foguearse en cabeceras españolas, tuvo un arranque demoledor en USA al comienzo de la década con Gata Infernal, Ultimate Spiderman o All-new Doop, pero en los últimos años sus apariciones se habían ido dispersando algo más. Rafer Roberts proviene de la autoedición con obras como Plastic Farm, pero parece haber encontrado su lugar en Valiant, donde hemos podido verlo en Harbinger Renegade y ahora en este Las Aventuras de Archer y Armstrong: En el saco.

La situación de partida da juego. Tiramos de un momento del extensísimo pasado de Aram Anni-Padda (alias Armstrong) para dar con un concepto a priori muy potente: Para recuperar un objeto de su pasado, Armstrong tendrá que entrar en su bolsa mágica, que guarda toda una dimensión de locuras y abarca mucho más que los objetos que ha ido reuniendo a lo largo de los siglos. Archer y Armstrong se embarcarán en una búsqueda en esta caotica dimensión poblada de todo tipo de bichos raros y puede que alguna que otra amenaza.

Hasta aquí perfecto y por si fuera poco, Las Aventuras de Archer y Armstrong: En el saco supone un punto de partida que no requiere haber leído lo anterior. Sin embargo, exceptuando lo expuesto hasta aquí y el espectacular arte de David Lafuente, la verdad es que este tebeo resulta bastante flojo.

En todo el tebeo se respira locura y caos y se advierte de algún modo la intención de divertir, pero a no ser que los chistes de borracheras y vomitonas sean tu tipo de humor, me temo que Roberts no está lo que se dice inspirado. Las intentonas de humor de este cómic se quedan en intentona y nos hace extrañar aquella frescura que nos sacaba la sonrisa y hacía que nos cayeran genial los dos protagonistas en la etapa anterior. Incluso existe un intento de introspección en los personajes, que si bien puede plantar algunas semillas a futuro, es de escaso interés por sí mismo y no consigue en ningún caso esa cercanía que te daba ganas de acompañar a este dúo en sus estrafalarias aventuras.

Es muy raro que un tebeo con bichos a lo minion, hombres pez, montañas de basura, dioses cabra de la fiesta, robots gigantes, monjas ninja y todo tipo de molonidades no consiga resultar mínimamente cómico.

De hecho Rafer Roberts es capaz de conseguir casi lo que a priori parecía imposible: un tebeo con dibujo de David Lafuente que no resulta divertido y es que por intachable que pueda ser la labor del gijonés, la historia no acompaña. Lafuente sigue estando enorme. Ya nos había demostrado más de una vez cómo es capaz de ser abigarrado en sus composiciones y aún así tremendamente limpio y sintético en su resolución. La dimensión de la bolsa de Armstrong es un maremagnum donde todo lo extravagante se mueve ruidosamente y a la vez y donde el tono de delirante caricatura se respira en cada escena.

Las Aventuras de Archer y Armstrong: En el saco nos da una historia que no deja de ser entretenida, pero que en ningún momento llega a divertida. No sé me ocurre mejor encargado para esta serie que David Lafuente, pero Rafer Roberts nos hace echar mucho de menos a Fred Van Lente.