Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

La Patrulla Condenada: Nada

La Patrulla Condenada: Nada
Guion
Gerard Way, Jeremy Lambert
Dibujo
Mike Allred, Nick Derington, Dan McDaid
Tinta
Mike Allred, Tom Fowler, Dan McDaid
Color
Laura Allred, Tamra Bonvillain
Formato
Rústica, 168 páginas
Precio
15.95 €
Editorial
ECC. 2019
Edición original
Doom Patrol 7-12 USA

Bona to vada!!!

La primera temporada de la Patrulla Condenada de Gerard Way ha terminado con Nada, el segundo tomo que recientemente ha lanzado ECC. No, tranquilos, la serie no ha cerrado en América. De hecho, acaba de ver la luz el primer número de la nueva serie, Doom Patrol: Weight of the worlds. Pero paso a paso, vamos con lo que tenemos entre manos.

doom patrol 7 pg patrulla condenada

Cuando uno piensa en la Patrulla Condenada, el primer nombre que va a venir a la cabeza es, inevitablemente, el de Grant Morrison. No es el creador del grupo, honor que corresponde a los injustamente olvidados Arnold Drake, Bob Haney y Bruno Premiani, responsables además de una memorable época durante la Silver Age que quizás era un poco más rara de lo habitual en la época. Tampoco fue Morrison el encargado de traer de vuelta al grupo a la actualidad post-Crisis en Tierras Infinitas, tras más de una década de olvido casi total, ese fue Paul Kupperberg, que firmó una etapa anodina que recordaba más a la Patrulla X, el otro grupo de inadaptados con jefe en silla de ruedas, que a la auténtica Patrulla Condenada. Así que, ahora ya sí, tras año y medio de tebeos francamente olvidables, el escritor escocés recibió el encargo de hacer lo que quisiera con ese grupo porque, total, para lo que estaba saliendo qué más daba ya.

Y lo que hizo Grant Morrison fue, sin duda, la etapa dorada de esta deliciosa panda de freaks en sus más de cincuenta años de existencia. Una etapa inspirada en la rareza de sus primeros tiempos, pero que superaba a todo lo que se había hecho antes, y que no sería ni remotamente igualada posteriormente. Su sucesora al frente del título, Rachel Pollack, firmó una etapa continuista con tono y estilo, pero sin los niveles de genialidad que tuvimos los años anteriores. Y a lo largo de los años posteriores, pasaron por la Patrulla Condenada una sucesión de escritores que intentaban dar un toque personal al grupo pero quedándose en etapas grises y olvidables (como las de Keith Giffen o John Byrne) o en otras que estaban tan alejadas de lo que era la Patrulla que bien podría haber sido un título de nueva creación (como la de John Arcudi).

Hasta que ha llegado Gerard Way.

Más de veinte años después del final de la Era Morrison, nadie le había vuelto a coger el punto a estos personajes. Así que, con la idea en mente de que si algo no está roto no lo toques, la editorial decidió ponerlos en manos del escritor que había firmado diez años atrás The Umbrella Academy, un título que no podía negar su inspiración en la Patrulla de Morrison y su admiración por el escritor escocés. Y, por fin, la Patrulla Condenada vuelve a ser un título interesante… aunque excesivamente deudor de Grant Morrison.

doom patrol 8 pg patrulla condenada

Sí, Grant Morrison tomó los personajes y le sensación general de rareza que Arnold Drake y Bruno Premiani habían sembrado en los años sesenta, y con ello hizo algo totalmente nuevo. Algo diferente, innovador, transgresor. Pero Gerard Way ha intentado homenajear a su inspirador y mimetizar su estilo con tanto ahínco que resulta demasiado evidente. Casi tan evidente como que Way no tiene ni remotamente el talento que tiene Morrison.

No me entendáis mal. La Patrulla Condenada de Gerard Way es un tebeo más que correcto, por encima de la media. Es una lectura agradable con un dibujo espectacular. Pero es que se nota demasiado que Way intenta ser Morrison en lugar de Morrison y se queda muy corto. Pero eh, ya lo intentaba con The Umbrella Academy con similar resultado -bueno, se le notan los diez años de experiencia adicional escribiendo-, así que nos podíamos esperar lo que finalmente hemos leído.

Gerard Way basa el grupo en una alineación que nos resulta de sobra conocida: Robotman, el Hombre Negativo, Flex Mentallo, Danny La Calle (no, este no), una muy desdibujada y plana Crazy Jane, apariciones aquí y allá de Niles Caulder y Nadie, que viene acompañado… no, no de la Hermandad de Dada. De la Hermandad de Nada. Casi todo gira alrededor de ideas y personajes que llevan décadas ya con nosotros. Solo casi: hay un personaje que prácticamente se come todas las escenas donde sale y es de nueva creación. Hablamos, por supuesto, del gato de Space Case, otro personaje nuevo al que resulta fácil coger un cierto cariño.

doom patrol 8 portada

Y así como el guion de Way, aunque funciona, da la sensación de ser un Morrison de Hacendado, en el dibujo estamos en otro nivel totalmente diferente. Nick Derington hace un trabajo que deja al lector con la boca abierta a cada página y consigue que Mike Allred, artista invitado que abre el tomo, pase casi desapercibido. Derington ya consiguió atraer nuestra atención con las portadas de Mr. Milagro, pero lo que hace aquí es memorable. Consigue salir airoso de todos los retos que le pone Way, haciendo que la rareza parezca fácil y se convierte en la auténtica estrella de la serie. Y la splash page de la cabeza de Robotman… bueno, no descarto que acabe convertida en un póster en mi casa.

En resumen, la etapa de Way no es ni de lejos lo mejor que se ha podido sacar de la Patrulla Condenada, pero para todo aquel que ya haya exprimido todo lo que tiene que dar la de Morrison -y es mucho y a muchos niveles- y no se atreva con la Silver Age del grupo, aún inédita en castellano, es una interesante etapa. Por cierto, los contínuos retrasos de esta serie en su edición original hicieron que Las Guerras Lácteas aparecieran antes del final de este tomo, pero el orden de lectura correcto es después.