Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

Hora de Aventuras 13

Hora de Aventuras 13
Guion
Christopher Hastings
Dibujo
Ian McGinty
Color
Maarta Laiho
Formato
Rústica 17 x 26 cm. 96 Páginas color
Precio
13,50 EUR
Editorial
NORMA Editorial. 2019
Edición original
Adventure Time 58-61 USA

Finn y Jake saben que la cosa se complica cuando empiezan a aparecer viejos amigos y enemigos… De hecho, se ponen tan chungas que puede que tengan que pasar una buena temporada en la Luna. ¡El destino de Ooo pende de un hilo! ¡Futuros astronautas, estad atentos!

Después de muchos años explorando y saqueando mazmorras, Finn y Jake deciden que ya va siendo hora de tener la suya propia, y llenarla de trampas, tesoros, monstruos y demás parafernalia. Es el lugar ideal para guardar esa extraña espada que lanza rayos láser que encontraron en una de sus aventuras. Pero descubrirán que no es tan fácil crear una mazmorra, y mucho menos mantenerla inexpugnable. Viajes en el tiempo, contrapartidas de otras dimensiones, una temporadita en una base lunar y unos monstruos gigantescos que quieren asar el mundo a la parrilla para comérselo, o destruirlo, o yo qué sé. Todo muy loco, tron. Es lo que tiene Hora de Aventuras, que permite a los autores hacer y deshacer a su antojo en un universo tan amplio que todo tiene cabida. Siempre y cuando sea comprensible para los lectores, claro. Y aquí es donde se pincha la rueda.

hora de aventuras

Christopher Hastings (Soy GrootLa Increíble Masacre-Gwen), nos mete de sopetón en una historia en la que aparece un tal Jermaine, de aspecto idéntico a Jake, junto a nuestros héroes. ¿De dónde ha salido? ¿Cómo ha llegado a parar aquí? ¿De qué conoce a los protagonistas? ¿Y por qué están hablando del padre de Finn? ¿Qué sabemos de éste? Demasiadas incógnitas que uno espera que reciban respuesta a lo largo de estas páginas, pero que quedan sin responder en cuanto Hastings empieza a hablar de la mazmorra y los tesoros. Y de este Jermaine, que aparece en las cuatro primeras páginas del tomo, nada más se sabe. Lo que sigue es una historia plagada de viajes en el tiempo, con un Finn que envejece y rejuvenece, que viaja al pasado y luego al futuro para darse a sí mismo una espada mágica. Un argumento que encajaría perfectamente con el entorno alocado y absurdo del mundo de Hora de Aventuras, si no fuera porque una historia tan enrevesada puede marear y perder al lector más joven y menos hecho a estas intrincadas aventuras. Casi me pierdo yo, con eso os lo digo todo.

Esta historia rompe un poco con el resto de Hora de Aventuras que hemos podido leer, en el sentido de que es bastante más oscura y enrevesada que anteriores entregas. Por otro lado, la narrativa es algo confusa, y los continuos viajes al pasado, presente y futuro de los personajes hacen que no tengamos muy claro en qué punto de la narración estamos. Hastings consigue algunos aciertos, como la representación del Gremio de Maestros de Mazmorras (estereotipos de adultolescentes asociales con ortodoncias jugando con maquetas en un sótano), pero la sensación final es agridulce, de una lectura insatisfactoria, más cerca a un proyecto personal del guionista que lo que esperamos de un cómic de Hora de Aventuras. El dibujo corre a cargo, igual que en el tomo anterior, de Ian McGinty (Steven UniverseHello Kitty), con coloreado de Maarta Laiho (Leñadoras, Clarence), que mantienen el estilo y la tónica gráfica habitual de la serie.

hora de aventuras

Una vez más, es NORMA Editorial quien se hace cargo de la publicación de esta serie, al igual que de las demás adaptaciones de series de Carton Network como Historias Corrientes, Clarence o Steven Universe. Es de destacar la subida de precio con respecto al volumen anterior (de 11,50 € a 13,50 €), manteniendo el mismo número de páginas. En EEUU la serie ha finalizado en el número 75, con lo que sólo faltan 14 números por publicar en España, más algunas miniseries y novelas gráficas que aguardan su turno, y que es de esperar que NORMA les dé salida en algún momento del futuro cercano.

Por cierto, que en un momento de la historia Jake el perro canta la canción del beicon frito. Por si algún despistado no la conoce, es ésta (cuidado, que es pegadiza):