Y con todos ustedes, el nuevo colaborador de Es La Hora De Las Tortas, Enrique Acebes, veterano en el mundo de los blogs sobre comics desde 2005, retornando al tema después de unas vacaciones de dos años desde que dejó abandonada La Librería cual perrillo en una gasolinera en verano...

El problema del material que nunca se ha leído por aquí (o que llevan la tira sin una reedición) es que se tiende a mitificarlos. Se ponía Cerebus como uno de los mejores tebeos jamás publicados, y cuando por fin llegó aquí hubo gente que dijo que menudo tostón. En serio, conozco a varios. Lo mismo pasaba con la Odisea de la Metamorfosis de Starlin o con el Cuarto Mundo de Kirby. Que sí, que habrá gente que disfrute como enanos con esas obras, pero hay muchos que tenían las expectativas tan altas que lo único que sienten es decepción.

Uno de éstos es la etapa de John Romita Jr. en Daredevil con Ann Nocenti al guión. Era muy habitual que, cuando la gente pedía reediciones de material clásico a Panini en foros y demás, saliera esta “legendaria” etapa. Y hala, aquí tenéis 9 números en tapa dura por 10 pavos.

Yo tuve esta serie en grapa, de cuando la publicó Fórum. Y recuerdo que tampoco me pareció gran cosa, y acabó en la pila de descartes. Se la cambié a un amigo por otro lote de tebeos, así que tampoco llevaba las expectativas muy altas. Pero, hey, es Romita Jr, uno de los mejores narradores que ha dado el tebeo de superhéroes y tal… Como muestra, un boton, que se suele decir. Y ayer que me lo leí de una sentada. Y las sensaciones son tan encontradas como esperaba.

Por un lado, Romita está tan espléndido como recordaba. Estos números están dibujados en la que posiblemente es la mejor época de este dibujante. Ya ha dejado atrás su estilo de principiante visto en Spiderman, y aún está por llegar la dejadez con la que coge los lápices en los últimos años. Estamos ante un dibujante en estado de gracia, con un estilo inconfundible, una anatomía más que correcta (bueno, vale, los niños que dibuja este hombre son muy cabezones, pero es marca de la casa y tiene su encanto), y un dinamismo… que parece que el próximo puñetazo de Daredevil va a salir de la página y te va a saltar una muela. Y encima está entintado por Al Williamson, uno de los dos entintadores que mejor le pegan a este hombre. El otro, por cierto, es Klaus Janson.

Pero los tebeos, en contra de lo que pensaran los chicos de Image en los 90, no son sólo dibujo. Hay una persona llamada guionista que también tiene su parte de protagonismo en el tebeo. Y mientras que un buen guión con un mal dibujo puede ser un tebeo legible, incluso disfrutable (no creo que muchos piensen que Rick Veitch sea un gran dibujante, y ahí está la Cosa del Pantano de Alan Moore), un mal guión con un buen dibujo se queda en un portafolio con letras. ¿Y es éste es el caso? Lamentablemente, sí.

Ann Nocenti nunca me ha parecido una gran guionista. Quizás su trabajo más disfrutable me resulte la serie limitada de Longshot, y más por Arthur Adams que por ella. Pero es que los tebeos incluídos en este tomo… ¡son un tostón!

Estamos de acuerdo en que un tebeo es una vía perfectamente válida para transmitir la ideología de un autor. Pero es que este Daredevil… aburre. Sí, la señora se posiciona, entre otras causas, en pro de los derechos de los animales (con sus discursitos moralizantes incluídos, como ese “un animal criado para ser comido se merece una vida digna y feliz”), pero a veces da la sensación de estar leyendo un panfleto que se sale de lo que se espera de un tebeo de superhéroes.

Y otro punto que no ayuda en absoluto es la selección de los números incluídos. Ni empieza en este tomo la historia que nos cuentan ni acaba en él. Empezamos con un crossover con Inferno y después nos encontramos con un Daredevil medio indigente lamentándose de haber sido infiel a su pareja, sin saber de dónde viene todo esto. Y en los últimos números nos plantean una historia con los Inhumanos metidos por medio que no llegas a saber de qué va, ¡pero es que tampoco se resuelve toda la trama de la segunda mitad del tomo! Como si vas al cine, llegas media hora tarde y te sales media hora antes de que acabe la película.

¿Vale la pena? Buf. Pues depende. Depende de si tienes problemas de espacio, de si te lo permite tu economía, de si te gustan mucho los autores (venga, vale, el autor) o el personaje. Yo, personalmente, no lo voy a tirar a la basura, pero tampoco es una compra precisamente memorable. Porque ha salido en Marvel Héroes, que si llega a salir en Marvel Deluxe a precio hinchado ya te digo que habría sido un timo.

Pero vamos, que si lo que quieres es un tebeo de Daredevil dibujado por Romita Jr. adelante con él, aunque la verdad es que hay mejores alternativas…