Hola niños y niñas. Escribo estas palabras minutos después de visionar el primer episodio de una de las series más esperadas, o mejor dicho, de la serie de Estreno de la nueva temporada televisiva, Agentes de SHIELD, Marvel‘s Agents of SHIELD. Una nueva piedra que cimiente el Universo Cinematográfico compartido por Marvel.
Solamente quiero decir que estoy más que encantado con este primer paso, con esta serie que apunta muy buenas maneras, siempre y cuando las audiencias, las altas esferas, los presupuestos y las mentes pensantes de Marvel, ABC y Disney hagan bien su trabajo: dejar a Joss Whedon y Kevin Feige al timón de la división marvelita para televisión. Y controlar a Jeph Loeb cuando quiera meter mano en los guiones.
Rebajada ya la euforia inicial (ver la escena final del episodio me ha alegrado el día), el primer episodio de los nuevos Agentes de SHIELD a cargo de nuestro querido Agente Coulson (Clark Gregg), es más que un aperitivo de lo que nos podemos esperar: una serie para todos los públicos (para eso se emite en el canal familiar de Disney, no esperéis ver mucha violencia desatada), con misión semanal o prodecimental, interacción entre personajes y una historia-río marca inigualable de toda serie creada por Whedon, que nos desvelará la organización malvada que esté detrás de todos los secretos que la Unidad Especial del Nivel Siete de Coulson van a investigar. Apuesto por I.M.A., Ideas Mecánicas Avanzadas. Pero se admiten posibles candidatos.
Pero volviendo al primer episodio, dirigido y escrito por Joss Whedon junto con sus dos colaboradores habituales, su hermano Jed Whedon y Maurissa Tancharoen (acompañados por Jeffrey Bell), nos encontramos un nuevo status quo tras los eventos contados en la película de Los Vengadores, cuando todo el planeta se da cuenta que no estamos solos, ya que habitan con nosotros dioses nórdicos, aliens o monstruos salidos de cualquier película de Serie-B de los cincuenta, elementos que rompen el delicado equilibrio social y político del planeta.
A partir de aquí, posibles spoilers irán apareciendo.
Ante esta eventualidad, María Hill (Cobie Smulders) apadrina un nuevo equipo de Búsqueda y Ataque, cuya misión es encontrar, clasificar y en caso necesario neutralizar, todos aquellos individuos con poderes o metahumanos que vayan apareciendo a lo largo del planeta.
Este equipo está dirigido por el presuntamente fallecido Agente Coulson, que por arte de magia vuelve a la vida para alegría del fandom y de los amantes de los misterios, ya que gran parte de los misterios de la serie será descubrir cómo ha vuelto de la tumba, sobre todo tras escuchar la conversación entre Maria Hill y el jefe médico de SHIELD.
Yo apuesto a que es un Simulacro de Vida, cómo los robots que utiliza Nick Furia en los tebeos. No creo que unas vacaciones en Haití sean tan milagrosas cómo nos venden. A no ser que el Hermano Vudú tenga algo que ver.
¿Quién es el heroico encapuchado? Esa es la pregunta que pone en marcha toda la serie, cuyo desenlace nos acerca un poco más al universo compartido con las películas, ya que cierto experimento aparecido en la tercera película de Iron Man, será el causante de los quebraderos de cabeza de esta Unidad Especial. Extremis, el Suero del Supersoldado y los Rayos Gamma entra por la puerta grande en la serie, además de ciertos restos robados de los Chitauri, los bonitos gadgets made Shield (esperemos que los diseños de Kirby y Steranko sean el códice de la serie) que abundan por toda la serie, siendo el coche de Coulson, Lola, el mejor momento del episodio, cuando se eleva del suelo, igualito que el que vemos en los tebeos conducido por Furia.
A pesar de tener el toque Whedon en todo el metraje, con sus grandiosos diálogos y humor inteligente destilando en cada uno de los planos (con homenajes a la frase más famosa de Spiderman: un gran poder conlleva…, o al título donde nació Thor, Journey into Mistery), se nota que la configuración del grupo y sus personalidades algo estereotipadas (ojo a los buenos momentos que podemos esperar de los dos científicos del grupo), necesitan ir encajando poco a poco. Los que amamos esas maravillas televisivas llamadas Buffy Cazavampiros o Firefly/Serenity sabemos que en poco tiempo esos personajes se desatarán y disfrutaremos con una necesaria evolución episodio a episodio. Además de ver las más que posibles incorporaciones al grupo, ya que alguien con superpoderes terminarán incorporándose al grupo (cómo en su momento hizo Angel o Spike en Buffy Cazavampiros).
Acción muy medida y mejor rodada, distintos escenarios (de Los Ángeles pasamos a París), interacción de personajes, es lo que ofrece este más que correcto episodio de presentación, que no engaña a nadie y se agradece, en espera que el avance de la serie sea necesario y preciso cómo en una serie regular de papel.
Ya hablaremos dentro de un mes de la serie en profundidad, cuando haya más episodios, viendo las virtudes y puntos flacos de Agentes de SHIELD. Mientras tanto, seguiré sonriendo cómo un niño al ver a Lola volar de nuevo.
