Es la hora de las tortas!!!

Es la hora de las tortas!!!

El Daredevil de Mark Waid: ¿bien o mal?

Mucho se ha escrito estos meses sobre el nuevo rumbo que el guionista Mark Waid ha dado a la colección del cuernecitos, después de tantos años de ser Matt Murdock el pupas del Universo Marvel.

Pero, ¿de qué aguas vienen estos lodos?

Daredevil nació en 1964 de la mano de Stan Lee y Bill Everett. Lee quería recrear el éxito de Spiderman y creó a un “doble” para aprovechar el filón: un acróbata que se balancease por la ciudad y que zurrara a los villanos a ritmo de chistes y chanzas. Pero para que no se notase tanto el parecido le hizo ciego y le dotó de sentidos superdesarrollados. Y Jack Kirby y Bill Everett le dotaron de un traje horrible, que al poco tuvieron a bien cambiar por el rojo carmesí que todos conocemos y amamos.

Lo cierto es que cuando un héroe tiene como villanos a segundones de la talla del Matador, el Zancudo o la Rana Saltarina, la única forma de afrontarlo es con sentido del humor e incansable verborrea. Es decir, no se puede ser un héroe “grim and gritty” cuando tu adversario va vestido como una rana y lleva zapatos con muelles.

panel_dd025b

La cosa alcanzó cotas insospechadas de surrealismo con el nacimiento del hermano gemelo de Matt: Mike Murdock. Cuando Matt no supo cómo explicar sus continuas desapariciones para convertirse en Daredevil, hizo aparecer de la nada un misterioso hermano gemelo, con una personalidad completamente opuesta a la suya. Mientras que Matt era un buen chico, serio y responsable, Mike era charlatán y extrovertido, exactamente como Daredevil.

No hace falta que os digamos que Mike era en realidad Matt disfrazado. Lo raro es que nadie se preguntara por qué nunca veían juntos a Mike y Matt en la misma habitación. Pero la gente mordió el anzuelo, y cuando la sombra de la sospecha se disipó, Mike tuvo una muerte muy conveniente y todo volvió a la normalidad.

OhKaren3Pic3

La cosa siguió por estos derroteros durante unos cuantos años, hasta la llegada del dibujante Frank Miller a la colección. Con el tiempo, Miller se fue quedando con los guiones hasta hacer suyo el personaje. Pero el personaje no cambió de la noche a la mañana con la llegada de Miller. No olvidemos que su Daredevil seguía repartiendo estopa con una sonrisa en los labios, e incluso se permitía algo de mala leche sarcástica con algunos secundarios.

Daredevil - 172 - Gang War! - 03

Pero poco a poco Daredevil se va haciendo cada vez más oscuro: tira a Bullseye desde lo alto de un edificio, y luego le tortura jugando con él a la ruleta rusa. Miller reinventa su origen con un Jack Murdock alcohólico y maltratador. Y llega Elektra.

Miller creó a Elektra para poder matarla, sin ser plenamente consciente del potencial que tenía el personaje. Ponía un caramelo al alcance de Murdock, haciendo regresar a su amor de juventud, para quitárselo poco después haciéndola morir manos de Bullseye. Esto supuso un descenso a los infiernos del personaje, cayendo, y perdonad el tópico, en una espiral de autodestrucción: su novia Heather Glenn se vuelve alcohólica y posteriormente se suicida, Elektra resucita para volver a morir, y su querida Karen Page reaparece convertida en una ex-actriz porno yonki que vende la identidad de Matt a Kingpin a cambio de un chute. Matt pierde su casa y su licencia de abogado, pero recupera el amor de Karen y parece que vuelve a ser feliz. Pero no tardaría en llegar la guionista Ann Nocenti para volver a poner todo patas arriba y hacerle pasar por un auténtico “infierno” a manos de Mefisto.

Los 90 fueron especialmente duros para Daredevil. No porque se lo hicieran pasar mal sus guionistas, sino porque no tuvo un equipo creativo capaz de sacar lo mejor de él. Fueron historias nada trascendentales que supusieron un cambio de uniforme (las hombreras eran un accesorio imprescindible en los 90) y un breve escarceo con la informática.

A finales de los 90 se le quiere dar un muy necesario relanzamiento al personaje y se decide incluirle en el sello Marvel Knights y dotarle de un equipo creativo estrella: el guionista Kevin Smith y el dibujante Joe Quesada. Smith, que tiene tendencia a dejar su huella en los personajes que escribe de la manera más trágica posible (recordad lo que le hizo a la Gata Negra en “El mal que hacen los hombres” y a Batman en “Círculo sin fin”), decidió despedirse de la serie a lo grande, cargándose a Mysterio y a Karen Page (no sin antes desvelar que había contraído el SIDA durante su época… “libertina”). Otro amor de Matt que mandan a criar malvas.

deathofkarenpage

La serie la retoma el dúo Bendis / Maleev, que continúa con la tónica de hacer de Daredevil un justiciero urbano, alejado de los villanos coloridos y los puñetazos aderezados con chistes. Es más, para que nos confiemos, hace que Matt se case con Milla Donovan, para luego volverla loca e ingresarla en un psiquiátrico. No es que Matt tenga mala suerte con las mujeres, es que las mujeres tienen mala suerte cuando están con Matt.

Bendis y Maleev dieron todo lo que tenían al personaje (que no es poco, teniendo en cuenta que es una de las etapas mejor consideradas por el público, sólo superada por la de Miller), para ser retomado por Ed Brubaker, que lo convierte en líder de la mano y víctima de una posesión demoníaca. Para desintoxicarse de tanto mal karma, Matt abandona la ciudad de incógnito y se da una vuelta por la América profunda (nada que no hubiera hecho 20 años antes, cuando Nocenti tenía las riendas de la serie).

Es entonces cuando entra en escena Mark Waid.

2603554-daredevil

Waid, a quien entrevistamos hace unos años, decidió que ya está bien de que Matt sea un saco de boxeo emocional, y merece un respiro. Por eso su Daredevil ha abierto los ojos (guiño, guiño), se ha dado cuenta que la autocompasión no le lleva a ningún sitio, y se ha propuesto pasárselo bien cada momento del día.

Y, personalmente, creo que ya era hora. Por mucho que nos mole ver a un superhéroe oscuro y torturado, tanto sufrimiento acaba cansando, y apetece echarte unas risas con el personaje de una vez. Matt ha vuelto a ser el de antes.

Hemos preguntado a amigos y blogueros su opinión acerca de este cambio de rumbo, y esto es lo que nos han contestado:

El cambio de actitud del personaje frente al mundo realizado por parte de Mark Waid, no solo consigue una evolución lógica de Matt Murdock, sino que dota de más realismo a un superhéroe que ha pasado por un infierno los últimos años de su vida. La alegría está ahí, no solo cómo un escudo frente a los demás, sino cómo un arma para afrontar las adversidades. Además, era muy necesario un cambio de rumbo en la serie, la sombra de Frank Miller y Brian Bendis es muy alargada.

Marcos Miguel González, Panini Reseñas

Cuando quiero deprimirme, cojo un periódico o pongo la tele. Y agradezco profundamente a mi admirado, admirado Mark Waid lo que esta haciendo con el cuernecitos. Que ya le iba tocando, pobre, porque mira que poseerle un demonio. Bueno, a el no, a su cuerpo. Y cuando digo su cuerpo, me refiero a que… oh, que más da. Bravo por el nuevo y despreocupado Daredevil.

Jotace, El Blog de Jotace

A mi me encanta el Daredevil de Waid, es una pasada. Y si lo digo yo que soy el Puto amo… punto pelota.

Adbar Sabbar Jenkins, Cosas de Frikis

La verdad es que a mi me da igual que sea trágico o alegre mientras las historia mole. Lo que pasa es que con este Daredevil de Waid se me habían creado tantas espectatitvas, que finalmente me ha decepcionado un poco. Es un cómic entretenido y dibujado acojonantemente, pero no me parece esa revolución que parecen estar intentando vender.

Alain Villcorta, Laintxo.

Se agradece que después de Shadowland donde la serie de DD parecía haber perdido el rumbo, se haya suavizado el tono “noir” para volver un poco a la senda “superheroica”, aunque para gustos colores. 😉 El “reboot” en DD Reborn realizado por Andy Diggle es un buen punto de partida para la etapa de Mark Waid.

Antonio Juan Lluesma, Es La Hora De Las Tortas

No sabría decantarme porque, tradicionalista que es uno, ¿desde cuándo es Matt Murdock un amargado de la vida una vez adquirió sus poderes? ¿Desde Frank Miller? Porque anteriormente no era jovial como el Peter Parker despreocupado de sus inicios pero no ha sido, ni por asomo, un superhéroe tan oscuro como el que nos han presentado durante las dos últimas décadas. Me repatea que acudan guionistas a pervertir los personajes con el ánimo de explotar la moda de turno y por eso aplaudo el trabajo de Mark Waid el cual, por lo general, es coherente con el origen y la evolución lógica de los personajes que guioniza.

Sergio Morales, Tirafrutas